16 Versículo de la Biblia sobre Dios secando las cosas
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Porque hemos oído cómo el SEÑOR secó el agua del mar Rojo delante de vosotros cuando salisteis de Egipto, y de lo que hicisteis a los dos reyes de los amorreos que estaban al otro lado del Jordán, a Sehón y a Og, a quienes destruisteis por completo.
Porque el SEÑOR vuestro Dios secó las aguas del Jordán delante de vosotros hasta que pasasteis, tal como el SEÑOR vuestro Dios había hecho al mar Rojo, el cual El secó delante de nosotros hasta que pasamos,
Convirtió el mar en tierra seca; cruzaron el río a pie; regocijémonos allí en El.
He aquí, El retiene las aguas, y todo se seca, y las envía e inundan la tierra.
El reprende al mar y lo hace secar, y todos los ríos agota. Languidecen Basán y el Carmelo, y las flores del Líbano se marchitan.
el que dice a la profundidad del mar: ``Sécate"; y yo secaré tus ríos.
El convierte los ríos en desierto y los manantiales en secadales;
Tú abriste fuentes y torrentes; tú secaste ríos inagotables.
Porque los caballos de Faraón con sus carros y sus jinetes entraron en el mar, y el SEÑOR hizo volver sobre ellos las aguas del mar; pero los hijos de Israel anduvieron por en medio del mar sobre tierra seca.
Reprendió, pues, al mar Rojo, y se secó; y los condujo por las profundidades, como por un desierto.
¿No eres tú el que secó el mar, las aguas del gran abismo; el que transformó en camino las profundidades del mar para que pasaran los redimidos?
¿Por qué cuando vine no había nadie, {y} cuando llamé no había quien respondiera? ¿Acaso es tan corta mi mano que no puede rescatar, o no tengo poder para librar? He aquí, con mi reprensión seco el mar, convierto los ríos en desierto; sus peces hieden por falta de agua, mueren de sed.
`Convertiré en sequedal los canales del Nilo y venderé la tierra en manos de malvados; desolaré la tierra y cuanto hay en ella por mano de extraños. Yo, el SEÑOR, he hablado.'
Y el SEÑOR destruirá la lengua del mar de Egipto; agitará su mano sobre el río con su viento abrasador, lo partirá en siete arroyos y hará que se pueda pasar en sandalias.
Asolaré montes y collados, y secaré toda su vegetación; convertiré los ríos en islas, y las lagunas secaré.
Por tanto, así dice el SEÑOR: He aquí, yo defenderé tu causa, y ejecutaré tu venganza; secaré su mar y haré que se sequen sus manantiales.