50 Versículo de la Biblia sobre el apoyo
Versículos Más Relevantes
He aquí, Dios es el que me ayuda; el Señor es el que sostiene mi alma.
Miré, y no había quien ayudara, me asombré de que no hubiera quien apoyara; entonces me salvó mi brazo, y fue mi furor el que me sostuvo.
Que desde el santuario te envíe ayuda, y desde Sion te sostenga.
Porque los ojos del SEÑOR recorren toda la tierra para fortalecer a aquellos cuyo corazón es completamente suyo. Tú has obrado neciamente en esto. Ciertamente, desde ahora habrá guerras contra ti.
por vuestra participación en el evangelio desde el primer día hasta ahora,
El SEÑOR lo sostendrá en su lecho de enfermo; en su enfermedad, restaurarás su salud.
Si digo: Mi pie ha resbalado, tu misericordia, oh SEÑOR, me sostendrá.
pero en caso que me tarde, {te escribo} para que sepas cómo debe conducirse uno en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y sostén de la verdad.
y Juana, mujer de Chuza, mayordomo de Herodes, y Susana, y muchas otras que de sus bienes personales contribuían al sostenimiento de ellos.
pero vosotros decís: ``Si un hombre dice al padre o a la madre: `Cualquier cosa mía con que pudieras beneficiarte es corbán (es decir, ofrenda {a Dios})'";
Pero si alguno no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo.
y con él estará siempre mi mano; mi brazo también lo fortalecerá.
En mi primera defensa nadie estuvo a mi lado, sino que todos me abandonaron; que no se les tenga en cuenta.
Por tanto, alentaos los unos a los otros, y edificaos el uno al otro, tal como lo estáis haciendo.
En todo os mostré que así, trabajando, debéis ayudar a los débiles, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: ``Más bienaventurado es dar que recibir."
Levántate, porque {este} asunto es tu responsabilidad, pero estaremos contigo; anímate y haz{lo}.
no seas arrogante para con las ramas; pero si eres arrogante, {recuerda que} tú no eres el que sustenta la raíz, sino que la raíz es {la que te sustenta} a ti.
Viva mi alma para alabarte, y que tus ordenanzas me ayuden.
Y después de que hayáis sufrido un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que os llamó a su gloria eterna en Cristo, El mismo {os} perfeccionará, afirmará, fortalecerá {y} establecerá.
De ti he recibido apoyo desde {mi} nacimiento; tú eres el que me sacó del seno de mi madre; para ti es continuamente mi alabanza.
Así que, nosotros los que somos fuertes, debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles y no agradarnos a nosotros mismos.
Me empujaste con violencia para que cayera, pero el SEÑOR me ayudó.
Y os exhortamos, hermanos, a que amonestéis a los indisciplinados, animéis a los desalentados, sostengáis a los débiles {y} seáis pacientes con todos.
Pues ellos salieron por amor al Nombre, no aceptando nada de los gentiles.
Porque día tras día se pasaban {hombres} a David para ayudarlo, hasta que hubo un gran ejército, como un ejército de Dios.
Así que habiendo recibido ayuda de Dios, continúo hasta este día testificando tanto a pequeños como a grandes, no declarando más que lo que los profetas y Moisés dijeron que sucedería:
Si el SEÑOR no hubiera sido mi socorro, pronto habría habitado mi alma en el {lugar del} silencio.
Porque he aquí, el Señor, DIOS de los ejércitos, quitará de Jerusalén y de Judá el sustento y el apoyo: todo sustento de pan y todo sustento de agua;
Así también ordenó el Señor que los que proclaman el evangelio, vivan del evangelio.
Con él está {sólo} un brazo de carne, pero con nosotros está el SEÑOR nuestro Dios para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo confió en las palabras de Ezequías, rey de Judá.
Pero vosotros decís: ``Cualquiera que diga a {su} padre o a {su} madre: `Es ofrenda {a Dios} todo lo mío con que pudieras ser ayudado',
Cuando caiga, no quedará derribado, porque el SEÑOR sostiene su mano.
Y al que se le enseña la palabra, que comparta toda cosa buena con el que le enseña.
pero no asiéndose a la Cabeza, de la cual todo el cuerpo, nutrido y unido por las coyunturas y ligamentos, crece con un crecimiento {que es} de Dios.
Vio que no había nadie, y se asombró de que no hubiera quien intercediera. Entonces su brazo le trajo salvación, y su justicia le sostuvo.
Porque recordáis, hermanos, nuestros trabajos y fatigas, {cómo,} trabajando de día y de noche para no ser carga a ninguno de vosotros, os proclamamos el evangelio de Dios.
Porque los brazos de los impíos serán quebrados; mas el SEÑOR sostiene a los justos.
No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia.
El SEÑOR es la porción de mi herencia y de mi copa; tú sustentas mi suerte.
es decir, para que {cuando esté} entre vosotros nos confortemos mutuamente, cada uno por la fe del otro, tanto la vuestra como la mía.
Y el SEÑOR Dios dijo: No es bueno que el hombre esté solo; le haré una ayuda idónea.
¿Quién se levantará por mí contra los malhechores? ¿Quién me defenderá de los que hacen iniquidad?
Confía en el SEÑOR con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento.
cooperando también vosotros con nosotros con la oración, para que por muchas personas sean dadas gracias a favor nuestro por el don que nos ha sido impartido por medio de {las oraciones de} muchos.
El SEÑOR sostiene a todos los que caen, y levanta a todos los oprimidos.
El hombre cargado con culpa de sangre humana, fugitivo será hasta la muerte; que nadie lo apoye.
He aquí, esta es la tercera vez que estoy preparado para ir a vosotros, y no os seré una carga, pues no busco lo que es vuestro, sino a vosotros; porque los hijos no tienen la responsabilidad de atesorar para {sus} padres, sino los padres para {sus} hijos.
Danos ayuda contra el adversario, pues vano es el auxilio del hombre.
Muchos dicen de mí: Para él no hay salvación en Dios. (Selah)