21 Versículo de la Biblia sobre En busca de alimentos
Versículos Más Relevantes
``Pero si decís: ` ¿Qué vamos a comer el séptimo año si no sembramos ni recogemos nuestras cosechas?',
Dicen a sus madres: ¿Dónde hay grano y vino?, mientras desfallecen como heridos en las plazas de la ciudad, mientras exhalan su espíritu en el regazo de sus madres.
Y murmuró el pueblo contra Moisés, diciendo: ¿Qué beberemos?
Vaga en busca de pan, diciendo: `` ¿Dónde está?" Sabe que es inminente el día de las tinieblas.
Por tanto, no os preocupéis, diciendo: `` ¿Qué comeremos?" o `` ¿qué beberemos?" o `` ¿con qué nos vestiremos?"
Por eso os digo, no os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis o qué beberéis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo {más} que la ropa?
Vosotros, pues, no busquéis qué habéis de comer, ni qué habéis de beber, y no estéis preocupados.
Y dijo a sus discípulos: Por eso os digo: No os preocupéis por {vuestra} vida, qué comeréis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis.
He aquí, como asnos monteses en el desierto, salen con afán en busca de alimento {y} de pan para {sus} hijos en el yermo.
merodean {buscando} qué devorar, y si no se sacian, gruñen.
Todo su pueblo gime buscando pan; han dado sus tesoros a cambio de comida para restaurar sus vidas. Mira, oh SEÑOR, y observa que me están despreciando.
La lengua del niño de pecho se le pega al paladar por la sed; los pequeños piden pan, {pero} no hay quien {lo} reparta.
Con peligro de nuestras vidas conseguimos nuestro pan, enfrentándonos a la espada del desierto.
Llamé a mis amantes, {mas} ellos me han engañado. Mis sacerdotes y mis ancianos han perecido en la ciudad, cuando buscaban alimento para sí a fin de restaurar sus fuerzas.
Así que todo lo que poseía lo dejó en mano de José, y con él {allí} no se preocupaba de nada, excepto del pan que comía. Y era José de gallarda figura y de hermoso parecer.
Había quienes decían: Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas somos muchos; por tanto, que se nos dé trigo para que comamos y vivamos.
por tanto, he aquí, te entregaré por posesión a los hijos del oriente, y asentarán en ti sus campamentos y pondrán en ti sus tiendas; ellos comerán tus frutos y ellos beberán tu leche.
Y los discípulos le dijeron*: ¿Dónde conseguiríamos nosotros en el desierto tantos panes para saciar a una multitud tan grande?
El día comenzaba a declinar, y acercándose los doce, le dijeron: Despide a la multitud, para que vayan a las aldeas y campos de los alrededores, y hallen alojamiento y consigan alimentos; porque aquí estamos en un lugar desierto.
ansiando saciarse de las {migajas} que caían de la mesa del rico; además, hasta los perros venían y le lamían las llagas.