Vosotros también, poniendo toda diligencia en esto mismo, añadid a vuestra fe, virtud, y a la virtud, conocimiento;

No os engañéis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.

mostrando ellos, la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia y sus pensamientos, acusándose o aun excusándose unos a otros,

Por lo cual, dejad toda inmundicia y superfluidad de malicia, y recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.

Porque ésta es la voluntad de Dios, vuestra santificación; que os abstengáis de fornicación;

Mas para evitar fornicaciones, cada varón tenga su propia esposa, y cada mujer tenga su propio marido.

quienes conociendo el juicio de Dios, que los que hacen tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que aun consienten a los que las hacen.

Amado, no sigas lo malo, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; mas el que hace lo malo, no ha visto a Dios.

¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!

Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.

Los alimentos son para el vientre, y el vientre para los alimentos; pero tanto al uno como a los otros destruirá Dios. Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor; y el Señor para el cuerpo.

Él es la Roca, cuya obra es perfecta, porque todos sus caminos son rectitud: Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad; justo y recto es Él.

Para entender sabiduría y doctrina; para conocer las razones prudentes;

Porque las cosas invisibles de Él, su eterno poder y Divinidad, son claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por las cosas que son hechas; así que no tienen excusa.

teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos a la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón;

Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, éstos, no teniendo ley, son ley a sí mismos,

Huid de la fornicación. Todo pecado que el hombre comete, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca.

En su día le darás su jornal, y no se pondrá el sol sin dárselo; pues es pobre, y con él sustenta su vida; para que no clame contra ti a Jehová, y sea en ti pecado.

Y manifiestas son las obras de la carne, que son: Adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,

Si vivimos en el Espíritu, andemos también en el Espíritu.

Si fueren destruidos los fundamentos, ¿Qué podrá hacer el justo?

Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, y el conocimiento fuere dulce a tu alma,

El principio de la sabiduría es el temor de Jehová. Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.

sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada.

Hacer justicia y juicio es a Jehová más agradable que sacrificio.

Fueron los árboles a elegir rey sobre sí, y dijeron al olivo: Reina sobre nosotros.

Y el derecho se retiró, y la justicia se puso lejos; porque la verdad tropezó en la plaza, y la equidad no pudo entrar.

Se oye por todas partes que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aun se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la esposa de su padre.

sino que el juicio volverá a la justicia, y en pos de ella irán todos los rectos de corazón.

los cuales habiendo perdido toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para con avidez cometer toda clase de impureza.

Mi defensa está en Dios, que salva a los rectos de corazón.

manteniendo vuestra honesta manera de vivir entre los gentiles; para que, en lo que ellos murmuran de vosotros como de malhechores, al ver vuestras buenas obras, glorifiquen a Dios en el día de la visitación.

¿No han de levantar todos éstos refrán sobre él, y sarcasmos contra él? Y dirán: ¡Ay del que multiplicó lo que no era suyo! Y, ¿hasta cuándo había de amontonar sobre sí barro espeso?

¿Eres llamado siendo siervo? No te dé cuidado; pero si puedes hacerte libre, procúralo más.

Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros como conviene a santos;

No admitirás falso rumor. No te concertarás con el impío para ser testigo falso.

Los proverbios de Salomón. El hijo sabio alegra al padre; pero el hijo necio es tristeza de su madre.

Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto libremente podrás comer;

por cuanto aborrecieron la sabiduría, y no escogieron el temor de Jehová,

Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

Y uno de los escribas que los había oído disputar, y sabía que les había respondido bien, vino y le preguntó: ¿Cuál es el primer mandamiento de todos?

Así que, por cierto es ya una falta en vosotros que tengáis pleitos entre vosotros mismos. ¿Por qué no sufrís más bien el agravio? ¿Por qué no sufrís más bien el ser defraudados?

Y si alguna persona pecare, que hubiere oído la voz del que juró, y él fuere testigo que vio, o supo, si no lo denunciare, él llevará su pecado.

He aquí, solamente esto he hallado; que Dios hizo al hombre recto, mas ellos buscaron muchas imaginaciones.