10 Versículo de la Biblia sobre La sinceridad, en la vida cristiana

No digo {esto} como un mandamiento, sino para probar, por la solicitud de otros, también la sinceridad de vuestro amor.

La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con {amor} incorruptible.

Ahora pues, temed al SEÑOR y servidle con integridad y con fidelidad; quitad los dioses que vuestros padres sirvieron al otro lado del Río y en Egipto, y servid al SEÑOR.

Pero el propósito de nuestra instrucción es el amor {nacido} de un corazón puro, de una buena conciencia y de una fe sincera.

El amor {sea} sin hipocresía; aborreciendo lo malo, aplicándoos a lo bueno.

Puesto que en obediencia a la verdad habéis purificado vuestras almas para un amor sincero de hermanos, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro.

Hijos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.

Porque nuestra satisfacción es ésta: el testimonio de nuestra conciencia que en la santidad y en la sinceridad {que viene} de Dios, no en sabiduría carnal sino en la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo y especialmente hacia vosotros.

Pues no somos como muchos, que comercian con la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios {y} delante de Dios hablamos en Cristo.

Pues nuestra exhortación no {procede} de error ni de impureza ni {es} con engaño; sino que así como hemos sido aprobados por Dios para que se nos confiara el evangelio, así hablamos, no como agradando a los hombres, sino a Dios que examina nuestros corazones. Porque como sabéis, nunca fuimos a {vosotros} con palabras lisonjeras, ni con pretexto para lucrar, Dios es testigo,