16 Versículo de la Biblia sobre Lana
Versículos Más Relevantes
Coméis la leche, y os vestís de la lana; la gruesa degolláis, no apacentáis las ovejas.
Y cuando en el vestido hubiere plaga de lepra, en vestido de lana, o en vestido de lino; o en estambre, o en trama de lino, o de lana, o en piel, o en cualquier obra de piel;
No te vestirás de mistura, de lana y lino juntamente.
Dálet Buscó lana y lino, y con voluntad labró con sus manos.
porque como a vestidura, los comerá polilla, como a lana, los comerá gusano; mas mi justicia permanecerá perpetuamente, y mi salud por siglos de siglos.
Y será que cuando entraren por las puertas del atrio interior, se vestirán de vestimentas de lino; no asentará sobre ellos lana, cuando ministraren en las puertas del atrio de adentro, y en el interior.
Luego tomará el sacerdote madera de cedro, e hisopo, y escarlata, y lo echará en medio del fuego en que arde la vaca.
Porque habiendo leído Moisés todos los mandamientos de la Ley a todo el pueblo, tomando la sangre de los becerros y de los machos cabríos con agua, y lana de grana, e hisopo, roció a todo el pueblo, y juntamente al mismo libro,
Entonces Mesa rey de Moab era pastor, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos y cien mil carneros con sus vellones.
Las primicias de tu grano, de tu vino, y de tu aceite, y las primicias de la lana de tus ovejas le darás;
Damasco, tu mercadera por la multitud de tus productos, por la abundancia de toda riqueza, con vino de Helbón, y lana blanca.
Porque su madre fornicó; la que los engendró fue avergonzada; porque dijo: Iré tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida.
Venid luego, dirá el SEÑOR, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, serán tornados como la lana.
El que da la nieve como lana, derrama la escarcha como ceniza.
Estuve mirando hasta que fueron puestas sillas; y un Anciano de gran edad se sentó, cuyo vestido era blanco como la nieve, y el pelo de su cabeza como lana limpia; su silla llama de fuego, sus ruedas fuego ardiente.
Y su cabeza y sus cabellos eran blancos como la lana blanca, como la nieve; y sus ojos como llama de fuego;