56 Versículo de la Biblia sobre Las parábolas de Cristo
Versículos Más Relevantes
Por tanto, cualquiera que oye estas palabras mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca; y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; pero no se cayó, porque había sido fundada sobre la roca. Y todo el que oye estas palabras mías y no las pone en práctica, será semejante a un hombre insensato que edificó su casa sobre la arena;Leer más.
y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; y cayó, y grande fue su destrucción.
Y Jesús les dijo: ¿Acaso los acompañantes del novio pueden estar de luto mientras el novio está con ellos? Pero vendrán días cuando el novio les será quitado, y entonces ayunarán.
Y nadie pone un remiendo de tela nueva en un vestido viejo; porque el remiendo {al encogerse} tira del vestido y se produce una rotura peor.
Y nadie echa vino nuevo en odres viejos, porque entonces los odres se revientan, el vino se derrama y los odres se pierden; sino que se echa vino nuevo en odres nuevos, y ambos se conservan.
Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, pasa por lugares áridos buscando descanso y no {lo} halla.
Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar;
El sembrador salió a sembrar su semilla; y al sembrarla, una parte cayó junto al camino, y fue pisoteada y las aves del cielo se la comieron.
{Jesús} les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos puede compararse a un hombre que sembró buena semilla en su campo. Pero mientras los hombres dormían, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. Cuando el trigo brotó y produjo grano, entonces apareció también la cizaña.Leer más.
Y los siervos del dueño fueron y le dijeron: ``Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿Cómo, pues, tiene cizaña?" El les dijo: ``Un enemigo ha hecho esto". Y los siervos le dijeron*: `` ¿Quieres, pues, que vayamos y la recojamos?" Pero él dijo*: ``No, no sea que al recoger la cizaña, arranquéis el trigo junto con ella. ``Dejad que ambos crezcan juntos hasta la siega; y al tiempo de la siega diré a los segadores: `Recoged primero la cizaña y atadla en manojos para quemarla, pero el trigo recogedlo en mi granero.'"
Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo, y que de todas las semillas es la más pequeña; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de modo que LAS AVES DEL CIELO vienen y ANIDAN EN SUS RAMAS.
Es semejante a un grano de mostaza que un hombre tomó y echó en su huerto; y creció y se hizo árbol, y LAS AVES DEL CIELO ANIDARON EN SUS RAMAS.
Les dijo otra parábola: El reino de los cielos es semejante a la levadura que una mujer tomó y escondió en tres medidas de harina hasta que todo quedó fermentado.
El reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en el campo, que al encontrarlo un hombre, {lo vuelve} a esconder, y de alegría por ello, va, vende todo lo que tiene y compra aquel campo.
El reino de los cielos también es semejante a un mercader que busca perlas finas, y al encontrar una perla de gran valor, fue y vendió todo lo que tenía y la compró.
El reino de los cielos también es semejante a una red barredera que se echó en el mar, y recogió {peces} de toda clase; y cuando se llenó, la sacaron a la playa; y se sentaron y recogieron los {peces} buenos en canastas, pero echaron fuera los malos. Así será en el fin del mundo; los ángeles saldrán, y sacarán a los malos de entre los justos,Leer más.
y los arrojarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el crujir de dientes.
Y llamando junto a sí a la multitud, les dijo: Oíd y entended: no es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre; sino lo que sale de la boca, eso es lo que contamina al hombre. Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron*: ¿Sabes que los fariseos se escandalizaron cuando oyeron tus palabras?Leer más.
Pero El contestó y dijo: Toda planta que mi Padre celestial no haya plantado, será desarraigada. Dejadlos; son ciegos guías de ciegos. Y si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en el hoyo. Respondiendo Pedro, le dijo: Explícanos la parábola.
Por eso, el reino de los cielos puede compararse a cierto rey que quiso ajustar cuentas con sus siervos. Y al comenzar a ajustar{las,} le fue presentado uno que le debía diez mil talentos. Pero no teniendo él {con qué} pagar, su señor ordenó que lo vendieran, junto con su mujer e hijos y todo cuanto poseía, y así pagara la deuda.Leer más.
Entonces el siervo cayó postrado ante él, diciendo: ``Ten paciencia conmigo y todo te lo pagaré." Y el señor de aquel siervo tuvo compasión, y lo soltó y le perdonó la deuda. Pero al salir aquel siervo, encontró a uno de sus consiervos que le debía cien denarios, y echándole mano, {lo} ahogaba, diciendo: ``Paga lo que debes." Entonces su consiervo, cayendo {a sus pies,} le suplicaba, diciendo: ``Ten paciencia conmigo y te pagaré." Sin embargo, él no quiso, sino que fue y lo echó en la cárcel hasta que pagara lo que debía. Así que cuando vieron sus consiervos lo que había pasado, se entristecieron mucho, y fueron y contaron a su señor todo lo que había sucedido. Entonces, llamándolo su señor, le dijo*: ``Siervo malvado, te perdoné toda aquella deuda porque me suplicaste. `` ¿No deberías tú también haberte compadecido de tu consiervo, así como yo me compadecí de ti?" Y enfurecido su señor, lo entregó a los verdugos hasta que pagara todo lo que le debía. Así también mi Padre celestial hará con vosotros, si no perdonáis de corazón cada uno a su hermano.
Porque el reino de los cielos es semejante a un hacendado que salió muy de mañana para contratar obreros para su viña. Y habiendo convenido con los obreros en un denario al día, los envió a su viña. Y salió como a la hora tercera, y vio parados en la plaza a otros {que estaban} sin trabajo;Leer más.
y a éstos les dijo: ``Id también vosotros a la viña, y os daré lo que sea justo." Y ellos fueron. Volvió a salir como a la hora sexta y a la novena, e hizo lo mismo. Y saliendo como a la {hora} undécima, encontró a otros parados, y les dijo*: `` ¿Por qué habéis estado aquí parados todo el día sin trabajar?" Ellos le dijeron*: ``Porque nadie nos contrató." El les dijo*: ``Id también vosotros a la viña." Y al atardecer, el señor de la viña dijo* a su mayordomo: ``Llama a los obreros y págales {su} jornal, comenzando por los últimos hasta los primeros." Cuando llegaron los que {habían sido contratados} como a la hora undécima, cada uno recibió un denario. Y cuando llegaron los que {fueron contratados} primero, pensaban que recibirían más; pero ellos también recibieron un denario cada uno. Y al recibirlo, murmuraban contra el hacendado, diciendo: ``Estos últimos han trabajado {sólo} una hora, pero los has hecho iguales a nosotros que hemos soportado el peso y el calor abrasador del día." Pero respondiendo él, dijo a uno de ellos: ``Amigo, no te hago ninguna injusticia; ¿no conviniste conmigo en un denario? ``Toma lo que es tuyo, y vete; pero yo quiero darle a este último lo mismo que a ti. `` ¿No me es lícito hacer lo que quiero con lo que es mío? ¿O es tu ojo malo porque yo soy bueno?" Así, los últimos serán primeros, y los primeros, últimos.
Pero, ¿qué os parece? Un hombre tenía dos hijos, y llegándose al primero, {le} dijo: ``Hijo, ve, trabaja hoy en la viña." Y respondiendo él, dijo: ``No quiero;" {pero} después, arrepentido, fue. Y llegándose al otro, le dijo lo mismo; pero él respondió y dijo: ``Yo {iré,} señor"; y no fue.Leer más.
¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre? Ellos dijeron*: El primero. Jesús les dijo*: En verdad os digo que los recaudadores de impuestos y las rameras entran en el reino de Dios antes que vosotros. Porque Juan vino a vosotros en camino de justicia y no le creísteis, pero los recaudadores de impuestos y las rameras le creyeron; y vosotros, viendo {esto,} ni siquiera os arrepentisteis después para creerle.
Escuchad otra parábola. Había {una vez} un hacendado que PLANTO UNA VIÑA Y LA CERCO CON UN MURO, Y CAVO EN ELLA UN LAGAR Y EDIFICO UNA TORRE, la arrendó a unos labradores y se fue de viaje. Y cuando se acercó el tiempo de la cosecha, envió sus siervos a los labradores para recibir sus frutos. Pero los labradores, tomando a los siervos, a uno lo golpearon, a otro lo mataron y a otro lo apedrearon.Leer más.
Volvió a mandar otro grupo de siervos, mayor que el primero; y les hicieron lo mismo. Finalmente les envió a su hijo, diciendo: ``Respetarán a mi hijo." Pero cuando los labradores vieron al hijo, dijeron entre sí: ``Este es el heredero; venid, matémoslo y apoderémonos de su heredad." Y echándole mano, {lo} arrojaron fuera de la viña y {lo} mataron. Cuando venga, pues, el dueño de la viña, ¿qué hará a esos labradores? Ellos le dijeron*: Llevará a esos miserables a un fin lamentable, y arrendará la viña a otros labradores que le paguen los frutos a su tiempo. Jesús les dijo*: ¿Nunca leísteis en las Escrituras: ``LA PIEDRA QUE DESECHARON LOS CONSTRUCTORES, ESA, EN PIEDRA ANGULAR SE HA CONVERTIDO; ESTO FUE HECHO DE PARTE DEL SEÑOR, Y ES MARAVILLOSO A NUESTROS OJOS"? Por eso os digo que el reino de Dios os será quitado y será dado a una nación que produzca sus frutos. Y el que caiga sobre esta piedra será hecho pedazos; pero sobre quien ella caiga, lo esparcirá como polvo. Al oír sus parábolas los principales sacerdotes y los fariseos, comprendieron que hablaba de ellos.
El reino de los cielos puede compararse a un rey que hizo un {banquete} de bodas para su hijo. Y envió a sus siervos a llamar a los que habían sido invitados a las bodas, pero no quisieron venir. De nuevo envió otros siervos, diciendo: Decid a los que han sido invitados: ``Ved, ya he preparado mi banquete; he matado mis novillos y animales cebados, y todo está aparejado; venid a las bodas."Leer más.
Pero ellos no hicieron caso y se fueron: uno a su campo, otro a sus negocios, y los demás, echando mano a los siervos, los maltrataron y los mataron. Entonces el rey se enfureció, y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos asesinos e incendió su ciudad. Luego dijo* a sus siervos: ``La boda está preparada, pero los que fueron invitados no eran dignos. ``Id, por tanto, a las salidas de los caminos, e invitad a las bodas a cuantos encontréis." Y aquellos siervos salieron por los caminos, y reunieron a todos los que encontraron, tanto malos como buenos; y el salón de bodas se llenó de comensales. Pero cuando el rey entró a ver a los comensales, vio allí a uno que no estaba vestido con traje de boda, y le dijo*: ``Amigo, ¿cómo entraste aquí sin traje de boda?" Y él enmudeció. Entonces el rey dijo a los sirvientes: ``Atadle las manos y los pies, y echadlo a las tinieblas de afuera; allí será el llanto y el crujir de dientes." Porque muchos son llamados, pero pocos {son} escogidos.
Y de la higuera aprended la parábola: cuando su rama ya se pone tierna y echa las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, sabed que El está cerca, a las puertas. En verdad os digo que no pasará esta generación hasta que todo esto suceda.
Pero comprended esto: si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora de la noche iba a venir el ladrón, hubiera estado alerta y no hubiera permitido que entrara en su casa.
¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente a quien su señor puso sobre los de su casa para que les diera la comida a su tiempo? Dichoso aquel siervo a quien, cuando su señor venga, lo encuentre haciendo así. De cierto os digo que lo pondrá sobre todos sus bienes.Leer más.
Pero si aquel siervo {es} malo, {y} dice en su corazón: ``Mi señor tardará"; y empieza a golpear a sus consiervos, y come y bebe con los que se emborrachan, vendrá el señor de aquel siervo el día que no {lo} espera, y a una hora que no sabe, y lo azotará severamente y le asignará un lugar con los hipócritas; allí será el llanto y el crujir de dientes.
Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al novio. Y cinco de ellas eran insensatas, y cinco prudentes. Porque las insensatas, al tomar sus lámparas, no tomaron aceite consigo,Leer más.
pero las prudentes tomaron aceite en frascos junto con sus lámparas. Al tardarse el novio, a todas les dio sueño y se durmieron. Pero a medianoche se oyó un clamor: `` ¿Aquí está el novio! Salid a recibir{lo.}" Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas. Y las insensatas dijeron a las prudentes: ``Dadnos de vuestro aceite, porque nuestras lámparas se apagan." Pero las prudentes respondieron, diciendo: ``No, no sea que no haya suficiente para nosotras y para vosotras; id más bien a los que venden y comprad para vosotras." Y mientras ellas iban a comprar, vino el novio, y las que estaban preparadas entraron con él al {banquete} de bodas, y se cerró la puerta. Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ``Señor, señor, ábrenos." Pero respondiendo él, dijo: ``En verdad os digo que no os conozco." Velad, pues, porque no sabéis ni el día ni la hora.
Porque {el reino de los cielos es} como un hombre que al emprender un viaje, llamó a sus siervos y les encomendó sus bienes. Y a uno le dio cinco talentos, a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y se fue de viaje. El que había recibido los cinco talentos, enseguida fue y negoció con ellos y ganó otros cinco talentos.Leer más.
Asimismo el que {había recibido} los dos {talentos} ganó otros dos. Pero el que había recibido uno, fue y cavó en la tierra y escondió el dinero de su señor. Después de mucho tiempo vino* el señor de aquellos siervos, y arregló* cuentas con ellos. Y llegando el que había recibido los cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: ``Señor, me entregaste cinco talentos; mira, he ganado otros cinco talentos." Su señor le dijo: ``Bien, siervo bueno y fiel; en lo poco fuiste fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor." Llegando también el de los dos talentos, dijo: ``Señor, me entregaste dos talentos; mira, he ganado otros dos talentos." Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: ``Señor, yo sabía que eres un hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste, y tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; mira, {aquí} tienes lo que es tuyo." Pero su señor respondió, y le dijo: ``Siervo malo y perezoso, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. ``Debías entonces haber puesto mi dinero en el banco, y al llegar yo hubiera recibido mi dinero con intereses. ``Por tanto, quitadle el talento y dádselo al que tiene los diez talentos." Porque a todo el que tiene, {más} se le dará, y tendrá en abundancia; pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. Y al siervo inútil, echadlo en las tinieblas de afuera; allí será el llanto y el crujir de dientes.
Y si un reino está dividido contra sí mismo, ese reino no puede perdurar.
Y si una casa está dividida contra sí misma, esa casa no podrá permanecer.
Pero nadie puede entrar en la casa de un {hombre} fuerte y saquear sus bienes si primero no lo ata; entonces podrá saquear su casa.
Cuando un {hombre} fuerte, bien armado, custodia su palacio, sus bienes están seguros.
Decía también: El reino de Dios es como un hombre que echa semilla en la tierra, y se acuesta y se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y crece; cómo, él no lo sabe. La tierra produce fruto por sí misma; primero la hoja, luego la espiga, y después el grano maduro en la espiga.Leer más.
Y cuando el fruto lo permite, él enseguida mete la hoz, porque ha llegado {el tiempo de} la siega.
Y les decía: ¿Acaso se trae una lámpara para ponerla debajo de un almud o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero?
Nadie, cuando enciende una lámpara, la pone en un sótano ni debajo de un almud, sino sobre el candelero, para que los que entren vean la luz. La lámpara de tu cuerpo es tu ojo; cuando tu ojo está sano, también todo tu cuerpo está lleno de luz; pero cuando está malo, también tu cuerpo está lleno de oscuridad. Mira, pues, que la luz que en ti hay no sea oscuridad.Leer más.
Así que, si todo tu cuerpo está lleno de luz, sin tener parte alguna en tinieblas, estará totalmente iluminado como cuando la lámpara te alumbra con sus rayos.
{Es} como un hombre que se fue de viaje, {y} al salir de su casa dejó a sus siervos encargados, {asignándole} a cada uno su tarea, y ordenó al portero que estuviera alerta. Por tanto, velad, porque no sabéis cuándo viene el señor de la casa, si al atardecer, o a la medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga de repente y os halle dormidos.Leer más.
Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: ¡Velad!
Les dijo también una parábola: ¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en un hoyo?
¿Y por qué miras la mota que está en el ojo de tu hermano, y no te das cuenta de la viga que está en tu propio ojo? ¿O cómo puedes decir a tu hermano: ``Hermano, déjame sacarte la mota que está en tu ojo", cuando tú mismo no ves la viga que está en tu ojo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu ojo y entonces verás con claridad para sacar la mota que está en el ojo de tu hermano.
Porque no hay árbol bueno que produzca fruto malo, ni a la inversa, árbol malo que produzca fruto bueno. Pues cada árbol por su fruto se conoce. Porque {los hombres} no recogen higos de los espinos, ni vendimian uvas de una zarza. El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo que es bueno; y el {hombre} malo, del mal {tesoro} saca lo que es malo; porque de la abundancia del corazón habla su boca.
Cierto prestamista tenía dos deudores; uno {le} debía quinientos denarios y el otro cincuenta; {y} no teniendo ellos con qué pagar, perdonó generosamente a los dos. ¿Cuál de ellos, entonces, le amará más? Simón respondió, y dijo: Supongo que aquel a quien le perdonó más. Y {Jesús} le dijo: Has juzgado correctamente.Leer más.
Y volviéndose hacia la mujer, le dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Yo entré a tu casa {y} no me diste agua para los pies, pero ella ha regado mis pies con sus lágrimas y {los} ha secado con sus cabellos. No me diste beso, pero ella, desde que entré, no ha cesado de besar mis pies. No ungiste mi cabeza con aceite, pero ella ungió mis pies con perfume. Por lo cual te digo que sus pecados, que son muchos, han sido perdonados, porque amó mucho; pero a quien poco se le perdona, poco ama.
Respondiendo Jesús, dijo: Cierto hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, los cuales después de despojarlo y de darle golpes, se fueron, dejándolo medio muerto. Por casualidad cierto sacerdote bajaba por aquel camino, y cuando lo vio, pasó por el otro lado {del camino.} Del mismo modo, también un levita, cuando llegó al lugar y lo vio, pasó por el otro lado {del camino.}Leer más.
Pero cierto samaritano, que iba de viaje, llegó adonde él {estaba;} y cuando lo vio, tuvo compasión, y acercándose, le vendó sus heridas, derramando aceite y vino sobre {ellas;} y poniéndolo sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un mesón y lo cuidó. Al día siguiente, sacando dos denarios, se los dio al mesonero, y dijo: ``Cuídalo, y todo lo demás que gastes, cuando yo regrese te lo pagaré." ¿Cuál de estos tres piensas tú que demostró ser prójimo del que cayó en {manos de} los salteadores? Y él dijo: El que tuvo misericordia de él. Y Jesús le dijo: Ve y haz tú lo mismo.
También les dijo: Supongamos que uno de vosotros tiene un amigo, y va a él a medianoche y le dice: ``Amigo, préstame tres panes, porque un amigo mío ha llegado de viaje a mi {casa,} y no tengo nada que ofrecerle"; y aquél, respondiendo desde adentro, le dice: ``No me molestes; la puerta ya está cerrada, y mis hijos y yo estamos acostados; no puedo levantarme para darte {nada.}"Leer más.
Os digo que aunque no se levante a darle {algo} por ser su amigo, no obstante, por su importunidad se levantará y le dará cuanto necesite. Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
También les refirió una parábola, diciendo: La tierra de cierto hombre rico había producido mucho. Y pensaba dentro de sí, diciendo: `` ¿Qué haré, ya que no tengo dónde almacenar mis cosechas?" Entonces dijo: ``Esto haré: derribaré mis graneros y edificaré otros más grandes, y allí almacenaré todo mi grano y mis bienes.Leer más.
``Y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete." Pero Dios le dijo: `` ¿Necio! Esta {misma} noche te reclaman el alma; y {ahora,} ¿para quién será lo que has provisto?" Así es el que acumula tesoro para sí, y no es rico para con Dios.
Decía también a las multitudes: Cuando veis una nube que se levanta en el poniente, al instante decís: ``Viene un aguacero", y así sucede. Y cuando sopla el viento del sur, decís: ``Va a hacer calor", y {así} pasa. ¿Hipócritas! Sabéis examinar el aspecto de la tierra y del cielo; entonces, ¿por qué no examináis este tiempo presente?Leer más.
¿Y por qué no juzgáis por vosotros mismos lo que es justo?
Y les dijo esta parábola: Cierto hombre tenía una higuera plantada en su viña; y fue a buscar fruto de ella, y no {lo} halló. Y dijo al viñador: ``Mira, hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo. Córtala. ¿Por qué ha de cansar la tierra?" El entonces, respondiendo, le dijo: ``Señor, déjala por este año todavía, hasta que yo cave alrededor de ella, y le eche abono,Leer más.
y si da fruto el año que viene, {bien;} y si no, córtala."
Y comenzó a referir una parábola a los invitados, cuando advirtió cómo escogían los lugares de honor {a la mesa}, diciéndoles: Cuando seas invitado por alguno a un {banquete} de bodas, no tomes el lugar de honor, no sea que él haya invitado a otro más distinguido que tú, y viniendo el que te invitó a ti y a él, te diga: ``Dale {el} lugar a éste"; y entonces, avergonzado, tengas que irte al último lugar.Leer más.
Sino que cuando seas invitado, ve y siéntate en el último lugar, para que cuando llegue el que te invitó, te diga: ``Amigo, ven más adelante"; entonces serás honrado delante de todos los que se sientan {a la mesa} contigo. Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille será ensalzado.
Porque, ¿quién de vosotros, deseando edificar una torre, no se sienta primero y calcula el costo, para ver si tiene {lo suficiente} para terminarla? No sea que cuando haya echado los cimientos y no pueda terminar, todos los que lo vean comiencen a burlarse de él, diciendo: ``Este hombre comenzó a edificar y no pudo terminar."
¿O qué rey, cuando sale al encuentro de otro rey para la batalla, no se sienta primero y delibera si con diez mil {hombres} es {bastante} fuerte como para enfrentarse al que viene contra él con veinte mil? Y si no, cuando el otro todavía está lejos, le envía una delegación y pide condiciones de paz. Así pues, cualquiera de vosotros que no renuncie a todas sus posesiones, no puede ser mi discípulo.
Por tanto, buena es la sal, pero si también la sal ha perdido su sabor, ¿con qué será sazonada? No es útil ni para la tierra ni para el muladar; la arrojan fuera. El que tenga oídos para oír, que oiga.
Entonces El les refirió esta parábola, diciendo: ¿Qué hombre de vosotros, si tiene cien ovejas y una de ellas se pierde, no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la que está perdida hasta que la halla? Al encontrar{la, la} pone sobre sus hombros, gozoso;Leer más.
y cuando llega a su casa, reúne a los amigos y a los vecinos, diciéndoles: ``Alegraos conmigo, porque he hallado mi oveja que se había perdido." Os digo que de la misma manera, habrá {más} gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentimiento.
¿O qué mujer, si tiene diez monedas de plata y pierde una moneda, no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado hasta hallar{la?} Cuando {la} encuentra, reúne a las amigas y vecinas, diciendo: ``Alegraos conmigo porque he hallado la moneda que había perdido." De la misma manera, os digo, hay gozo en la presencia de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.
Y {Jesús} dijo: Cierto hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos le dijo al padre: ``Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde." Y él les repartió sus bienes. No muchos días después, el hijo menor, juntándolo todo, partió a un país lejano, y allí malgastó su hacienda viviendo perdidamente.Leer más.
Cuando lo había gastado todo, vino una gran hambre en aquel país, y comenzó a pasar necesidad. Entonces fue y se acercó a uno de los ciudadanos de aquel país, y él lo mandó a sus campos a apacentar cerdos. Y deseaba llenarse el estómago de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba {nada.} Entonces, volviendo en sí, dijo: `` ¿Cuántos de los trabajadores de mi padre tienen pan de sobra, pero yo aquí perezco de hambre! ``Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: `Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo; hazme como uno de tus trabajadores.'" Y levantándose, fue a su padre. Y cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y sintió compasión {por él,} y corrió, se echó sobre su cuello y lo besó. Y el hijo le dijo: ``Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo." Pero el padre dijo a sus siervos: ``Pronto; traed la mejor ropa y vestidlo, y poned un anillo en su mano y sandalias en los pies; y traed el becerro engordado, matad{lo,} y comamos y regocijémonos; porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado." Y comenzaron a regocijarse. Y su hijo mayor estaba en el campo, y cuando vino y se acercó a la casa, oyó música y danzas. Y llamando a uno de los criados, le preguntó qué era {todo} aquello. Y él le dijo: ``Tu hermano ha venido, y tu padre ha matado el becerro engordado porque lo ha recibido sano y salvo." Entonces él se enojó y no quería entrar. Salió su padre y le rogaba {que entrara.} Pero respondiendo él, le dijo al padre: ``Mira, por tantos años te he servido y nunca he desobedecido ninguna orden tuya, y {sin embargo,} nunca me has dado un cabrito para regocijarme con mis amigos; pero cuando vino este hijo tuyo, que ha consumido tus bienes con rameras, mataste para él el becerro engordado." Y él le dijo: ``Hijo {mío,} tú siempre has estado conmigo, y todo lo mío es tuyo. ``Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque éste, tu hermano, estaba muerto y ha vuelto a la vida; {estaba} perdido y ha sido hallado."
Decía también {Jesús} a los discípulos: Había cierto hombre rico que tenía un mayordomo; y éste fue acusado ante él de derrochar sus bienes. Entonces lo llamó y le dijo: `` ¿Qué es esto que oigo acerca de ti? Rinde cuentas de tu administración, porque no puedes ser más mayordomo." Y el mayordomo se dijo a sí mismo: `` ¿Qué haré? Pues mi señor me quita la administración. No tengo fuerzas para cavar, y me da vergüenza mendigar.Leer más.
``Ya sé lo que haré, para que cuando se me destituya de la administración me reciban en sus casas." Y llamando a cada uno de los deudores de su señor, dijo al primero: `` ¿Cuánto le debes a mi señor?" Y él dijo: ``Cien barriles de aceite." Y le dijo: ``Toma tu factura, siéntate pronto y escribe cincuenta." Después dijo a otro: ``Y tú, ¿cuánto debes?" Y él respondió: ``Cien medidas de trigo." El le dijo*: ``Toma tu factura y escribe ochenta." El señor elogió al mayordomo injusto porque había procedido con sagacidad, pues los hijos de este siglo son más sagaces en las relaciones con sus semejantes que los hijos de la luz.
Había cierto hombre rico que se vestía de púrpura y lino fino, celebrando cada día fiestas con esplendidez. Y un pobre llamado Lázaro yacía a su puerta cubierto de llagas, ansiando saciarse de las {migajas} que caían de la mesa del rico; además, hasta los perros venían y le lamían las llagas.Leer más.
Y sucedió que murió el pobre y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico y fue sepultado. En el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio* a Abraham a lo lejos, y a Lázaro en su seno. Y gritando, dijo: ``Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, pues estoy en agonía en esta llama." Pero Abraham le dijo: ``Hijo, recuerda que durante tu vida recibiste tus bienes, y Lázaro, igualmente, males; pero ahora él es consolado aquí, y tú estás en agonía. ``Y además de todo esto, hay un gran abismo puesto entre nosotros y vosotros, de modo que los que quieran pasar de aquí a vosotros no puedan, y tampoco nadie pueda cruzar de allá a nosotros." Entonces él dijo: ``Te ruego, pues, padre, que lo envíes a la casa de mi padre, pues tengo cinco hermanos, de modo que él los prevenga, para que ellos no vengan también a este lugar de tormento." Pero Abraham dijo*: ``Ellos tienen a Moisés y a los profetas; que los oigan." Y él dijo: ``No, padre Abraham, sino que si alguno va a ellos de entre los muertos, se arrepentirán." Mas {Abraham} le contestó: ``Si no escuchan a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán si alguno se levanta de entre los muertos."
Y les refería {Jesús} una parábola para enseñar{les} que ellos debían orar en todo tiempo, y no desfallecer, diciendo: Había en cierta ciudad un juez que ni temía a Dios ni respetaba a hombre alguno. Y había en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él {constantemente,} diciendo: ``Hazme justicia de mi adversario."Leer más.
Por algún tiempo él no quiso, pero después dijo para sí: ``Aunque ni temo a Dios, ni respeto a hombre alguno, sin embargo, porque esta viuda me molesta, le haré justicia; no sea que por venir continuamente me agote la paciencia." Y el Señor dijo: Escuchad lo que dijo* el juez injusto. ¿Y no hará Dios justicia a sus escogidos, que claman a El día y noche? ¿Se tardará mucho en responderles? Os digo que pronto les hará justicia. No obstante, cuando el Hijo del Hombre venga, ¿hallará fe en la tierra?
Refirió también esta parábola a unos que confiaban en sí mismos como justos, y despreciaban a los demás: Dos hombres subieron al templo a orar; uno era fariseo y el otro recaudador de impuestos. El fariseo puesto en pie, oraba para sí de esta manera: ``Dios, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: estafadores, injustos, adúlteros; ni aun como este recaudador de impuestos.Leer más.
``Yo ayuno dos veces por semana; doy el diezmo de todo lo que gano." Pero el recaudador de impuestos, de pie y a cierta distancia, no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: ``Dios, ten piedad de mí, pecador." Os digo que éste descendió a su casa justificado pero aquél no; porque todo el que se ensalza será humillado, pero el que se humilla será ensalzado.
Por eso dijo: Cierto hombre {de familia} noble fue a un país lejano a recibir un reino para sí y {después} volver. Y llamando a diez de sus siervos, les dio diez minas y les dijo: ``Negociad {con esto} hasta que yo regrese." Pero sus ciudadanos lo odiaban, y enviaron una delegación tras él, diciendo: ``No queremos que éste reine sobre nosotros."Leer más.
Y sucedió que al regresar él, después de haber recibido el reino, mandó llamar a su presencia a aquellos siervos a los cuales había dado el dinero, para saber lo que habían {ganado} negociando. Y se presentó el primero, diciendo: ``Señor, tu mina ha producido diez minas más." Y él le dijo: ``Bien hecho, buen siervo, puesto que has sido fiel en lo muy poco, ten autoridad sobre diez ciudades." Entonces vino el segundo, diciendo: ``Tu mina, señor, ha producido cinco minas." Y dijo también a éste: ``Y tú vas a estar sobre cinco ciudades." Y vino otro, diciendo: ``Señor, aquí está tu mina, que he tenido guardada en un pañuelo; pues te tenía miedo, porque eres un hombre exigente, que recoges lo que no depositaste y siegas lo que no sembraste." El le contestó*: ``Siervo inútil, por tus propias palabras te voy a juzgar. ¿Sabías que yo soy un hombre exigente, que recojo lo que no deposité y siego lo que no sembré? ``Entonces, ¿por qué no pusiste mi dinero en el banco, y al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses?" Y dijo a los que estaban presentes: ``Quitadle la mina y dád{sela} al que tiene las diez minas." Y ellos le dijeron: ``Señor, él {ya} tiene diez minas." Os digo, que a cualquiera que tiene, {más} le será dado, pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. Pero a estos mis enemigos, que no querían que reinara sobre ellos, traedlos acá y matadlos delante de mí.
En verdad, en verdad os digo: el que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteador. Pero el que entra por la puerta, es el pastor de las ovejas. A éste le abre el portero, y las ovejas oyen su voz; llama a sus ovejas por nombre y las conduce afuera.Leer más.
Cuando saca todas las suyas, va delante de ellas, y las ovejas lo siguen porque conocen su voz. Pero a un desconocido no seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños. Jesús les habló {por medio de} esta alegoría, pero ellos no entendieron qué era lo que les decía.
Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el viñador. Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo quita; y todo {el} que da fruto, lo poda para que dé más fruto. Vosotros ya estáis limpios por la palabra que os he hablado.Leer más.
Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no permanece en la vid, así tampoco vosotros si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto, porque separados de mí nada podéis hacer.