18 Versículo de la Biblia sobre Lo que es espiritual.
Versículos Más Relevantes
Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren.
Porque sabemos que la ley es espiritual; pero yo soy carnal, vendido bajo pecado.
El Espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; pues también el Padre tales adoradores busca que le adoren.
el cual también nos ha hecho ministros suficientes del nuevo testamento; no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.
se siembra cuerpo natural, resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo natural, y hay cuerpo espiritual.
Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.
Por tanto, os ruego hermanos por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro servicio racional.
Pues les pareció bueno, y son deudores a ellos; porque si los gentiles han sido hechos partícipes de sus bienes espirituales, deben también ellos servirles en los carnales.
lo cual también hablamos, no con palabras que enseña la humana sabiduría, sino con las que enseña el Espíritu Santo, acomodando lo espiritual a lo espiritual.
Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura; y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.
Pero el que es espiritual juzga todas las cosas; mas él no es juzgado por nadie.
Si nosotros sembramos en vosotros lo espiritual, ¿es gran cosa si cosechamos de vosotros lo material?
Y así está escrito: El primer hombre Adán fue hecho un alma viviente; el postrer Adán, un espíritu vivificante.
Mas lo espiritual no es primero, sino lo natural; luego lo espiritual.
porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas;
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, el cual nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,
porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra malicias espirituales en las alturas.