44 Versículo de la Biblia sobre Ministerio, naturaleza de
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los cuales mudaron la verdad de Dios en mentira, honrando y sirviendo a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.
Alabad al SEÑOR, desde la tierra, los dragones y todos los abismos; el fuego y el granizo, la nieve y el vapor, el viento de tempestad que ejecuta su palabra; los montes y todos los collados; el árbol de fruto, y todos los cedros;Leer más.
la bestia, y todo animal; el que va arrastrando, y el ave que vuela; los reyes de la tierra, y todos los pueblos; los príncipes, y todos los jueces de la tierra;
En aquel tiempo llamarán a Jerusalén: Trono del SEÑOR, y todos los gentiles se congregarán a ella en el nombre del SEÑOR en Jerusalén; ni andarán más tras la dureza de su corazón malvado.
Porque he aquí que en aquellos días, y en aquel tiempo en que haré tornar la cautividad de Judá y de Jerusalén, juntaré todos los gentiles, y los haré descender al valle de Josafat, y allí entraré en juicio con ellos a causa de mi pueblo, y de Israel mi heredad, a los cuales esparcieron entre las naciones, y partieron mi tierra;
¿Quién no te temerá, oh Señor, y engrandecerá tu Nombre? Porque tú sólo eres Santo; por lo cual todos los gentiles vendrán, y adorarán delante de ti, porque tus juicios son manifestados.
Y en el primer año de Ciro rey de Persia, para que se cumpliese la palabra del SEÑOR dicha por boca de Jeremías, despertó el SEÑOR el espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo pasar pregón por todo su reino, y también por escrito, diciendo: Así dijo Ciro rey de Persia: El SEÑOR Dios de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha mandado que le edifique Casa en Jerusalén, que está en Judá.
he aquí enviaré yo , y tomaré todos los linajes del aquilón, dice el SEÑOR, y a Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y los traeré contra esta tierra, y contra sus moradores, y contra todas estas naciones en derredor; y los mataré, y los pondré por escarnio, y por silbo, y en soledades perpetuas.
Y ahora yo he dado todas estas tierras en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y aun las bestias del campo le he dado para que le sirvan.
y diles: Así dijo el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que yo envío, y tomaré a Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y pondré su trono sobre estas piedras que escondí, y tenderá su dosel sobre ellas.
porque es ministro de Dios para tu bien. Mas si hicieres lo malo, teme; porque no sin causa trae el cuchillo; porque es ministro de Dios, vengador para castigo al que hace lo malo.
Sed pues sujetos a toda ordenación humana por Dios, ya sea a rey, como a superior, y a a los gobernadores, como de él enviados para venganza de los malhechores, y para loor de los que hacen bien.
Y vosotros seréis mi reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel.
Y vosotros seréis llamados sacerdotes del SEÑOR, ministros del Dios nuestro seréis dichos; comeréis las fuerzas de los gentiles, y con su gloria seréis sublimes.
vosotros también, como piedras vivas, son edificados una casa espiritual, y un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales, agradables a Dios por Jesús, el Cristo.
y nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios y su Padre: a él sea gloria e imperio para siempre jamás. Amén.
Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad en éstos; antes serán sacerdotes de Dios y del Cristo, y reinarán con él mil años.
Y estará sobre Aarón cuando ministrare; y se oirá su sonido cuando él entrare en el santuario delante del SEÑOR y cuando saliere; para que no muera.
Y a tus hermanos también, la tribu de Leví, la tribu de tu padre, hazlos llegar a ti, y se junten contigo, y te servirán; y tú y tus hijos contigo serviréis delante del tabernáculo del testimonio.
Y el hombre que procediere con soberbia, no escuchando al sacerdote que está para ministrar allí delante del SEÑOR tu Dios, o al juez, el tal varón morirá; y quitarás el mal de Israel.
Entonces dijo David: El arca de Dios no debe ser traída sino por los levitas; porque a ellos ha elegido el SEÑOR para que lleven el arca del SEÑOR, y le sirvan perpetuamente.
Como no puede ser contado el ejército del cielo, ni la arena del mar se puede medir, así multiplicaré la simiente de David mi siervo, y los levitas que a mí ministran.
Y el Tirsata (o capitán ) les dijo que no comiesen de las ofrendas, hasta que hubiese sacerdote con Urim y Tumim.
Y con estas cosas así ordenadas, en el primer Tabernáculo siempre entraban los sacerdotes para hacer los oficios de los sacrificios.
Tenemos un altar, del cual no tienen facultad de comer los que sirven al Tabernáculo.
ahora, pues, hacedlo; porque el SEÑOR ha hablado a David, diciendo: Por la mano de mi siervo David libraré a mi pueblo Israel de mano de los filisteos, y de mano de todos sus enemigos.
Y eligió a David su siervo, y lo tomó de las majadas de las ovejas;
que (en Espíritu Santo) por boca de David (nuestro padre), tu siervo, dijiste: ¿Por qué han bramado los gentiles, y los pueblos han pensado cosas vanas?
En aquel día, dijo el SEÑOR de los ejércitos, te tomaré, oh Zorobabel, hijo de Salatiel, siervo mío, dijo el SEÑOR, y te pondré como anillo de sellar; porque yo te escogí, dice el SEÑOR de los ejércitos.
No así a mi siervo Moisés, que es fiel en toda mi casa. Boca a boca hablaré con él, y de vista; el no verá al SEÑOR por figuras o semejanza; ¿por qué, pues, no tuvisteis temor de hablar contra mi siervo Moisés?
A éstos hirieron Moisés siervo del SEÑOR y los hijos de Israel; y Moisés siervo del SEÑOR dio aquella tierra en posesión a los rubenitas, gaditas, y a la media tribu de Manasés.
Y si el ministerio de muerte en la letra grabado en piedras, fue para gloria, tanto que los hijos de Israel no pudiesen poner los ojos en la faz de Moisés a causa de la gloria de su rostro, la cual había de perecer,
Y, Moisés a la verdad fue fiel sobre toda su casa, como siervo, pero para testificar lo que se había de decir;
Y el joven Samuel ministraba delante del SEÑOR, vestido de un efod de lino.
Y volvieron, y se lo dijeron. Y él dijo: La palabra de Dios es esta, la cual él habló por mano de su siervo Elías tisbita, diciendo: En la heredad de Jezreel comerán los perros las carnes de Jezabel.
Sabed ahora que de la palabra del SEÑOR que habló sobre la casa de Acab, nada caerá en tierra; y que el SEÑOR ha hecho lo que dijo por su siervo Elías.
Asimismo David y los príncipes del ejército apartaron para el ministerio a los hijos de Asaf, y de Hemán, y de Jedutún, los cuales profetizasen con arpas, salterios, y címbalos; y el número de ellos fue, de los varones idóneos para la obra de su ministerio respectivo :
Y dijo el SEÑOR: De la manera que anduvo mi siervo Isaías desnudo y descalzo tres años, señal y pronóstico sobre Egipto, y sobre Etiopía;
He aquí mi siervo, me reclinaré sobre él; escogido mío, en quien mi alma toma contentamiento; puse mi Espíritu sobre él, dará juicio a los gentiles. No clamará, ni alzará, ni hará oír su voz en las plazas. No acabará de quebrar la caña cascada, ni apagará el pábilo que humeare; sacará el juicio a verdad.Leer más.
No se cansará, ni desmayará, hasta que ponga en la tierra juicio, y las islas esperarán su ley.
desde el día que vuestros padres salieron de la tierra de Egipto hasta hoy. Y os envié a todos los profetas mis siervos, cada día madrugando y enviándolos;
Y envió el SEÑOR a vosotros todos sus siervos los profetas, madrugando y enviándoles; mas no oísteis, ni inclinasteis vuestro oído para escuchar,
A los cuales fue revelado, que no para sí mismos, sino para nosotros administraban las cosas que ahora os son anunciadas de los que os han predicado el Evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo; en las cuales desean mirar los ángeles.
pero en el día de la voz del séptimo ángel, cuando él comenzare a tocar la trompeta, el misterio de Dios será consumado, como él lo evangelizó a sus siervos los profetas.
Y los gentiles se han airado, y tu ira es venida, y el tiempo de los muertos para que sean juzgados, y para que des el galardón a tus siervos los profetas, y a los santos, y a los que temen tu Nombre, a los pequeñitos y a los grandes, y para que destruyas los que destruyen la tierra.