50 Versículo de la Biblia sobre escuchar a Dios
Versículos Más Relevantes
Así que la fe {viene} del oír, y el oír, por la palabra de Cristo.
Escuchad y oíd mi voz, prestad atención y oíd mis palabras.
Porque a mí ha inclinado su oído; por tanto {le} invocaré mientras yo viva.
Escuchad la instrucción y sed sabios, y no {la} menospreciéis.
El que es de Dios escucha las palabras de Dios; por eso vosotros no escucháis, porque no sois de Dios.
Pero El dijo: Al contrario, dichosos los que oyen la palabra de Dios y {la} guardan.
Les dirás, pues, todas estas palabras, mas no te escucharán; los llamarás, y no te responderán.
Ellos son del mundo; por eso hablan de parte del mundo, y el mundo los oye.
Ahora pues, hijos, escuchadme, porque bienaventurados son los que guardan mis caminos.
En verdad, en verdad os digo que viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que oigan vivirán.
Además me dijo: Hijo de hombre, recibe en tu corazón todas mis palabras que yo te hablo, y escúcha{las} atentamente.
Al que aparta su oído para no oír la ley, su oración también es abominación.
Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. En esto conocemos el espíritu de la verdad y el espíritu del error.
Aparta de mí el ruido de tus cánticos, pues no escucharé siquiera la música de tus arpas.
Oye, hijo mío, recibe mis palabras, y muchos serán los años de tu vida.
Pero respondiendo El, les dijo: Mi madre y mis hermanos son estos que oyen la palabra de Dios y {la} hacen.
Yo te he invocado, oh Dios, porque tú me responderás; inclina a mí tu oído, escucha mi palabra.
Y sucedió que, como yo había clamado y ellos no habían querido escuchar, así ellos clamaron y yo no quise escuchar --dice el SEÑOR de los ejércitos--
¿Hasta cuándo, oh SEÑOR, pediré ayuda, y no escucharás, clamaré a ti: ¡Violencia! y no salvarás?
¿Oh Señor, escucha! ¡Señor, perdona! ¡Señor, atiende y actúa! ¡No tardes, por amor de ti mismo, Dios mío! Porque tu nombre se invoca sobre tu ciudad y sobre tu pueblo.
Escucha esto, Job, detente y considera las maravillas de Dios.
El oído que oye y el ojo que ve, ambos los ha hecho el SEÑOR.
Por eso les hablo en parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden.
Entonces me invocarán, pero no responderé; me buscarán con diligencia, pero no me hallarán;
Tú has visto muchas cosas, pero no {las} observas; los oídos están abiertos, pero nadie oye.
Mas respondiendo Pedro y Juan, les dijeron: Vosotros mismos juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios;
Porque he llamado y habéis rehusado {oír}, he extendido mi mano y nadie ha hecho caso;
Pero tú no ruegues por este pueblo, ni levantes por ellos clamor ni oración; porque no escucharé cuando clamen a mí a causa de su aflicción.
¿Por qué no entendéis lo que digo? Porque no podéis oír mi palabra.
y apartarán sus oídos de la verdad, y se volverán a mitos.
Mas respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Debemos obedecer a Dios antes que a los hombres.
Guarda tus pasos cuando vas a la casa de Dios, y acércate a escuchar en vez de ofrecer el sacrificio de los necios, porque éstos no saben que hacen el mal.
escuchando las palabras de mis siervos los profetas que os he enviado repetidas veces, pero no los habéis escuchado,
``Acércate tú, y oye lo que el SEÑOR nuestro Dios dice; entonces dinos todo lo que el SEÑOR nuestro Dios te diga, y {lo} escucharemos y {lo} haremos."
Pero cuando yo te hable, te abriré la boca, y les dirás: ``Así dice el Señor DIOS." El que oye, que oiga; el que rehúse oír, que rehúse; porque son una casa rebelde.
Si observo iniquidad en mi corazón, el Señor no {me} escuchará.
Oíd, cielos, y escucha, tierra, porque el SEÑOR habla: Hijos crié y los hice crecer, mas ellos se han rebelado contra mí.
Oíd esto, casa de Jacob, los que lleváis el nombre de Israel y salisteis de las entrañas de Judá, los que juráis por el nombre del SEÑOR y hacéis mención del Dios de Israel, {pero} no en verdad ni en justicia,
Pero dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen.
``Pero no escucharon ni inclinaron su oído para apartarse de su maldad, para dejar de quemar sacrificios a otros dioses.
{Esto} sabéis, mis amados hermanos. Pero que cada uno sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para la ira;
Y el SEÑOR dijo a Samuel: Escucha la voz del pueblo en cuanto a todo lo que te digan, pues no te han desechado a ti, sino que me han desechado a mí para que no sea rey sobre ellos.