'Cada' en la Biblia
Más arriba de la Puerta de los Caballos, los sacerdotes hicieron reparaciones cada uno frente a su casa.
Sucedió que nuestros enemigos se enteraron que conocíamos {sus} propósitos y que Dios había desbaratado sus planes; entonces todos nosotros volvimos a la muralla, cada uno a su trabajo.
Cada uno de los que reedificaban tenía ceñida al lado su espada mientras edificaba. El que tocaba la trompeta {estaba} junto a mí.
En aquel tiempo dije también al pueblo: ``Cada hombre con su ayudante pase la noche dentro de Jerusalén, para que nos sirvan de centinela por la noche y de obrero por el día."
Ni yo, ni mis hermanos, ni mis criados, ni los hombres de la guardia que me seguían, ninguno de nosotros se quitó la ropa; cada uno {llevaba} su arma {aun} en el agua.
Se rebeló mi corazón dentro de mí, y reprendí a los nobles y a los oficiales y les dije: ``Ustedes están cobrando en exceso cada uno a su hermano." Por tanto congregué contra ellos una gran asamblea.
Lo que se preparaba para cada día era un buey {y} seis ovejas escogidas, también eran preparadas aves para mí; cada diez días {se proveía} en abundancia toda clase de vino. Y con todo esto, no reclamé el pan del gobernador, porque la servidumbre era pesada sobre este pueblo.
Cuatro veces me enviaron {mensajes} en la misma forma, y en cada ocasión yo les respondí de la misma manera.
Estos son los hijos de la provincia que subieron de la cautividad, {aquéllos} que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había llevado cautivos y que volvieron a Jerusalén y a Judá, cada uno a su ciudad,
El pueblo salió y trajeron las ramas y se hicieron tabernáculos, cada uno en su terrado, en sus patios, en los patios de la casa de Dios, en la plaza de la Puerta de las Aguas y en la plaza de la Puerta de Efraín.
{Esdras} leyó del Libro de la Ley de Dios cada día, desde el primer día hasta el último día. Celebraron la fiesta siete días, y al octavo día {hubo} una asamblea solemne según lo establecido.
Puestos de pie, {cada uno} en su lugar, una cuarta parte del día estuvieron leyendo en el Libro de la Ley del SEÑOR su Dios, y {otra} cuarta parte, estuvieron confesando y adorando al SEÑOR su Dios.
Asimismo echamos suertes para la provisión de madera {entre} los sacerdotes, los Levitas y el pueblo para que la traigan a la casa de nuestro Dios, conforme a nuestras casas paternas, en los tiempos fijados cada año, para quemar sobre el altar del SEÑOR nuestro Dios, como está escrito en la ley.
Además {nos hemos propuesto} traer cada año los primeros frutos de nuestra tierra y los primeros frutos de todo árbol a la casa del SEÑOR,
Los jefes del pueblo habitaron en Jerusalén, pero el resto del pueblo echó suertes a fin de traer uno de cada diez para que habitara en Jerusalén, la ciudad santa, mientras los otros nueve {se quedarían} en las {otras} ciudades.
Estos son los jefes de la provincia que habitaron en Jerusalén (en las ciudades de Judá cada cual habitó en su propiedad, en sus ciudades; los Israelitas, los sacerdotes, los Levitas, los sirvientes del templo, los descendientes de los siervos de Salomón.
El resto de Israel, de los sacerdotes {y} de los Levitas {estaban} en todas las ciudades de Judá, cada uno en su heredad.
Porque {había} un mandato del rey acerca de ellos y un reglamento fijo para los cantores de cada día.
Y todo Israel, en días de Zorobabel y en días de Nehemías, daba las porciones correspondientes a los cantores y a los porteros como se demandaba para cada día, y consagraban {parte} para los Levitas, y los Levitas consagraban {parte} para los hijos de Aarón.
También descubrí que las porciones de los Levitas no se {les} habían dado, por lo que los Levitas y los cantores que hacían el servicio se habían ido, cada uno a su campo.
Así los purifiqué de todo lo extranjero, y designé oficios para los sacerdotes y Levitas, cada uno en su ministerio,