'Calles' en la Biblia
Y los molí como polvo delante del viento; los esparcí como lodo de las calles.
Tú lo has visto, oh SEÑOR; no calles: Señor, de mí no te alejes.
Oye mi oración, oh SEÑOR, y escucha mi clamor; no calles ante mis lágrimas; porque peregrino soy contigo, y advenedizo, como todos mis padres.
Hay destrucción en medio de ella, y la opresión y el engaño no se alejan de sus calles.
Oh Dios, no guardes silencio; no calles, oh Dios, ni te estés quieto.
Oh Dios de mi alabanza, no calles;
Esté cargado nuestro ganado, sin fracasos y sin pérdida, y no {haya} gritos en nuestras calles.