'Daba' en la Biblia
Pero viendo Raquel que ella no daba hijos a Jacob, tuvo celos de su hermana, y dijo a Jacob: Dame hijos, o si no, me muero.
Aconteció, además, que mientras daba a luz, uno {de ellos} sacó su mano, y la partera {la} tomó y le ató un {hilo} escarlata en la mano, diciendo: Este salió primero.
Solamente la tierra de los sacerdotes no compró, pues los sacerdotes tenían ración de parte de Faraón, y vivían de la ración que Faraón les daba. Por tanto no vendieron su tierra.
Y {la costumbre} en tiempos pasados en Israel tocante a la redención y el intercambio {de tierras} para confirmar cualquier asunto era ésta: uno se quitaba la sandalia y se la daba al otro; y esta era la {manera de} confirmar en Israel.
Cuando llegaba el día en que Elcana ofrecía sacrificio, daba porciones a Penina su mujer y a todos sus hijos e hijas;
pero a Ana le daba una doble porción, pues él amaba a Ana, aunque el SEÑOR no le había dado hijos.
Puso guarniciones en Edom; por todo Edom puso guarniciones, y todos los edomitas fueron siervos de David. Y el SEÑOR daba la victoria a David dondequiera que iba.
El consejo que Ahitofel daba en aquellos días {era} como si uno consultara la palabra de Dios; así era {considerado} todo consejo de Ahitofel tanto por David como por Absalón.
Y Salomón daba a Hiram veinte mil coros de trigo como alimento para su casa, y veinte coros de aceite batido; esto daba Salomón a Hiram año tras año.
Puso guarniciones en Edom, y todos los edomitas fueron siervos de David. Y el SEÑOR daba la victoria a David dondequiera que iba.
Y todo Israel, en días de Zorobabel y en días de Nehemías, daba las porciones correspondientes a los cantores y a los porteros como se demandaba para cada día, y consagraban {parte} para los levitas, y los levitas consagraban {parte} para los hijos de Aarón.
Porque el oído que oía me llamaba bienaventurado, y el ojo que veía daba testimonio de mí;
Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, Santo, Santo, es el SEÑOR de los ejércitos, llena está toda la tierra de su gloria.
En tus prostituciones eras distinta de las {otras} mujeres: nadie te solicitaba para fornicar; tú dabas la paga, pero a ti ninguna paga se te daba. Eras distinta.
Y {con respecto a} la puerta del atrio exterior que daba al norte, midió su longitud y su anchura.
Sus ventanas, sus pórticos y sus figuras de palmeras {tenían} las mismas medidas de la puerta que daba al oriente; se subía a ella por siete gradas, y su pórtico {estaba} delante de ellas.
Entonces me llevó al atrio interior que daba al oriente, y midió la puerta conforme a aquellas mismas medidas.
Y correspondiendo a las entradas de las cámaras que daban hacia el sur, {había} una entrada al comienzo del corredor, el corredor frente al muro que daba al oriente, según se entra a ellas.
Cuando acabó de medir el interior del templo, me sacó por el camino de la puerta que daba al oriente, y lo midió todo alrededor.
Después me hizo volver a la entrada del templo; y he aquí, brotaban aguas de debajo del umbral del templo hacia el oriente, porque la fachada del templo daba hacia el oriente. Y las aguas descendían de debajo, del lado derecho del templo, al sur del altar.
Así que el mayordomo siguió suprimiendo los manjares y el vino que debían beber, y les daba legumbres.
Pues ella no sabía que era yo el que le daba el trigo, el mosto y el aceite, y le prodigaba la plata y el oro, {que} ellos usaban para Baal.