'Echaron' en la Biblia
la cual estando llena, la sacaron a la orilla; y sentados, cogieron lo bueno en vasos, y lo malo echaron fuera.
Y llegaron á él muchas gentes, que tenían consigo cojos, ciegos, mudos, mancos, y otros muchos enfermos: y los echaron á los pies de Jesús, y los sanó:
Y tomándole, le echaron fuera de la viña, y le mataron.
Y Jesús le dijo: Amigo, ¿a qué vienes? Entonces llegaron, y echaron mano a Jesús, y le prendieron.
y desnudándole, le echaron encima un manto de grana;
Y después que le hubieron colgado del madero, repartieron sus vestidos, echando suertes, para que se cumpliera lo que fue dicho por el profeta: Se repartieron mis vestidos, y sobre mi ropa echaron suertes.
Trajeron el pollino a Jesús, y echaron sobre él sus vestidos, y se sentó sobre él.
Y prendiéndole, le mataron, y le echaron fuera de la viña.
porque todos ellos echaron de lo que les sobra, pero ella, de su pobreza echó todo lo que poseía, todo lo que tenía para vivir.
Entonces ellos echaron en él sus manos, y le prendieron.
y levantándose, le echaron fuera de la ciudad, y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual la ciudad de ellos estaba edificada, para despeñarle.
Y volvió a enviar al tercero; mas ellos también a éste echaron herido.
Y le echaron fuera de la viña, y le mataron. ¿Qué pues, les hará el señor de la viña?
porque todos éstos, de lo que les sobra echaron para las ofrendas de Dios; mas ésta de su pobreza echó todo el sustento que tenía.
"Cuando estaba con ustedes cada día en el templo, no Me echaron mano; pero esta hora y el poder de las tinieblas son de ustedes."
Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y partiendo sus vestidos, echaron suertes.
Respondieron, y le dijeron: En pecados eres nacido del todo, ¿y tú nos enseñas? Y le echaron fuera.
Y dijeron entre ellos: No la partamos, sino echemos suertes sobre ella, de quién será; para que se cumpliera la Escritura, que dice: Partieron para sí mis vestidos, Y sobre mi vestidura echaron suertes. Y los soldados ciertamente hicieron esto.
Y Jesús les dice: Echad la red a la mano derecha del navío, y hallaréis. Entonces la echaron, y no la podían en ninguna manera sacar, por la multitud de los peces.
Y les echaron suertes, y cayó la suerte sobre Matías; y fue contado con los once apóstoles.
Mientras ellos hablaban al pueblo, se les echaron encima los sacerdotes, el capitán {de la guardia} del templo, y los saduceos,
Y les echaron mano, y los pusieron en la cárcel hasta el día siguiente; porque era ya tarde.
y echaron mano a los apóstoles, y los pusieron en la cárcel pública.
Mas los judíos incitaron a mujeres pías y honestas, y a los principales de la ciudad, y levantaron persecución contra Pablo y Bernabé, y los echaron de sus términos.
Y después que los hirieron de muchos azotes, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardara con diligencia;
Entonces Pablo les dijo: Azotados públicamente sin ser condenados, siendo hombres romanos, nos echaron en la cárcel; y ¿ahora nos echan encubiertamente? No, de cierto, sino vengan ellos y sáquennos.
Entonces todos ellos le echaron mano a Sóstenes, el oficial de la sinagoga, y lo golpeaban frente al tribunal, pero Galión no hacía caso de nada de esto.
Y cuando estaban para acabarse los siete días, unos judíos de Asia, como le vieron en el Templo, alborotaron todo el pueblo y le echaron mano,
Después que lo alzaron, usaron amarras para ceñir la nave; y temiendo encallar en {los bancos} de Sirte, echaron el ancla flotante y se abandonaron a la deriva.
Echaron la sonda y hallaron {que había} veinte brazas; pasando un poco más adelante volvieron a echar la sonda y hallaron quince brazas {de profundidad.}
Y temiendo que en algún lugar fuéramos a dar contra los escollos, echaron cuatro anclas por la popa y ansiaban que amaneciera.
Y echaron polvo sobre sus cabezas; y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: ¡Ay, ay, de aquella gran ciudad, en la cual todos los que tenían navíos en el mar se habían enriquecido de sus riquezas: que en una hora ha sido desolada!