'Idumea' en la Biblia
Pero el rey Salomón amó a muchas mujeres extranjeras junto con la hija de Faraón; a las de Moab, a las de Amón, a las de Idumea, a las de Sidón, y a las heteas;
Y dijo: ¿Por qué camino iremos? Y él respondió: Por el camino del desierto de Idumea.
Partieron, pues, el rey de Israel, el rey de Judá, y el rey de Idumea; y como anduvieron rodeando por el desierto siete días de camino, les faltó agua para el ejército, y para las bestias que los seguían.
Y Josafat dijo: Este tendrá palabra del SEÑOR. Y descendieron a él el rey de Israel, Josafat, y el rey de Idumea.
Y aconteció que por la mañana, cuando se ofrece el presente, he aquí vinieron aguas por el camino de Idumea, y la tierra fue llena de aguas.
Y cuando el rey de Moab vio que la batalla lo vencía, tomó consigo setecientos varones que sacaban espada, para romper contra el rey de Idumea; mas no pudieron.
En los días de éste se rebeló la Idumea, para no estar bajo el poder de Judá, y pusieron rey sobre sí.
¿Quién me llevará a la ciudad fortalecida? ¿Quién me llevará hasta Idumea?
¿Quién me guiará a la ciudad fortalecida? ¿Quién me guiará hasta Idumea?
Allí Idumea, sus reyes y todos sus príncipes, los cuales con su fortaleza fueron puestos con los muertos a espada; ellos yacerán con los incircuncisos, y con los que descienden al sepulcro.
Como te alegraste tú sobre la heredad de la Casa de Israel, porque fue asolada, así te haré a ti: asolado será el Monte de Seir, y toda Idumea, toda ella; y sabrán que yo soy el SEÑOR.
por eso, así dijo el Señor DIOS: He hablado por cierto en el fuego de mi celo contra los demás gentiles, y contra toda Idumea, que se disputaron mi tierra por heredad con alegría, de todo corazón, con menosprecio de ánimo, echándola a saqueo.
Así dijo el SEÑOR: Por tres pecados de Moab, y por el cuarto, no la convertiré; porque quemó los huesos del rey de Idumea hasta tornarlos en cal.
para que aquellos sobre los cuales es llamado mi nombre, posean el resto de Idumea, y a todos los gentiles, dijo el SEÑOR que hace esto.
y de Jerusalén, y de Idumea, y del otro lado del Jordán. Y los que moran alrededor de Tiro y de Sidón, grande multitud, oyendo cuán grandes cosas hacía, vinieron a él.