'Sabor' en la Biblia
Y la casa de Israel le puso el nombre de maná, y era como la semilla del cilantro, blanco, y su sabor era como de hojuelas con miel.
El pueblo iba, {lo} recogía y {lo} molía entre dos piedras de molino, o {lo} machacaba en el mortero, y {lo} hervía en el caldero y hacía tortas con él; y tenía el sabor de tortas cocidas con aceite.
Reposado ha estado Moab desde su juventud, ha estado tranquilo sobre su sedimento; no ha sido vaciado de vasija en vasija, ni ha ido al destierro; por eso retiene su sabor, y su aroma no ha cambiado.
Por tanto, buena es la sal, pero si también la sal ha perdido su sabor, ¿con qué será sazonada?