'Sellada' en la Biblia

Tienes sellada en manojo mi prevaricación, y enmiendas a mi iniquidad.

Huerto cerrado eres, oh hermana, esposa mía; fuente cerrada, fuente sellada.

Aunque te laves con salitre, y amontones jabón sobre ti, tu iniquidad está sellada delante de mí, dijo el Señor DIOS.

Tomé luego la carta de venta, sellada según el derecho y costumbre, y el traslado abierto.

Así dijo el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel: Toma estas cartas, esta carta de venta, la sellada, y ésta que es la carta abierta, y ponlas en un vaso de barro, para que se guarden muchos días.

Es la verdad del Cristo en mí, que esta gloria no me será sellada en las partes de Acaya.