1 Crónicas 29:3

A más de esto, por cuanto tengo mi contentamiento en la Casa de mi Dios, yo tengo en mi tesoro particular oro y plata, el cual he dado para la Casa de mi Dios, además de todas las cosas que he aparejado para la Casa del santuario:

1 Crónicas 21:24

Entonces el rey David dijo a Ornán: No, sino que efectivamente la compraré por su justo precio; porque no tomaré para el SEÑOR lo que es tuyo, ni sacrificaré holocausto sin costo.

1 Crónicas 22:4-5

Porque los sidonios y tirios habían traído a David madera de cedro innumerable.

1 Crónicas 22:14-16

He aquí, yo en mi estrechez he preparado para la Casa del SEÑOR cien mil talentos de oro, y un millar de millares de talentos de plata; no tiene peso el bronce ni el hierro, porque es mucho. Asimismo he preparado madera y piedra, a lo cual tú añadirás.

Salmos 26:8

SEÑOR, la habitación de tu Casa he amado, y el lugar del tabernáculo de tu gloria.

Salmos 27:4

Una cosa he demandado al SEÑOR, ésta buscaré; que esté yo en la Casa del SEÑOR todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura del SEÑOR, y para inquirir en su templo.

Salmos 84:1

¡Cuán amables son tus moradas, oh SEÑOR de los ejércitos!

Salmos 84:10

Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos; escogí antes estar a la puerta en la Casa de mi Dios, que habitar en las moradas de maldad.

Salmos 122:1-9

Yo me alegré con los que me decían: A la Casa del SEÑOR iremos.

Proverbios 3:9-10

Honra al SEÑOR de tu sustancia, y de las primicias de todos tus frutos;

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