1 Pedro 1:23

siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre.

Hebreos 4:12

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más penetrante que toda espada de dos filos, y penetra hasta partir el alma y el espíritu, y las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

1 Pedro 1:3

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos;

Juan 1:13

Los cuales son engendrados, no de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.

Juan 3:3

Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo: El que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios.

Santiago 1:18

Él, de su voluntad nos ha engendrado por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas.

Jeremías 23:28

El profeta que tuviere sueño, cuente el sueño; y el que tuviere mi palabra, cuente mi palabra verdadera. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo? dice Jehová.

Malaquías 2:3

He aquí, yo os dañaré vuestra sementera, y arrojaré sobre vuestros rostros el estiércol, el estiércol de vuestras fiestas solemnes, y con él seréis removidos.

Mateo 24:35

El cielo y la tierra pasarán, mas mis palabras no pasarán.

Juan 1:3

Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.

Juan 3:5

Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.

Juan 6:63

El Espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.

Romanos 1:23

y cambiaron la gloria del Dios incorruptible, en semejanza de imagen de hombre corruptible, y de aves, y de cuadrúpedos, y de reptiles.

1 Corintios 15:53-54

Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.

1 Pedro 1:25

mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y ésta es la palabra que por el evangelio os ha sido predicada.

1 Juan 3:9

Todo aquel que es nacido de Dios, no peca, porque su simiente permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.

1 Juan 5:18

Sabemos que cualquiera que es nacido de Dios, no peca, porque el que es engendrado de Dios, se guarda a sí mismo, y el maligno no le toca.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)