1 Reyes 19:5

Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido: y he aquí luego un ángel que le tocó, y le dijo: Levántate, come.

Génesis 28:11-15

y se encontró con un lugar, y durmió allí porque ya el sol se había puesto; y tomó de las piedras de aquel lugar y puso a su cabecera, y se acostó en aquel lugar.

Salmos 34:7

Zain El ángel del SEÑOR acampa en derredor de los que le temen, y los defiende.

Salmos 34:10

Yod Los leoncillos necesitaron, y tuvieron hambre; pero los que buscan al SEÑOR, no tendrán falta de ningún bien.

Daniel 8:19

Y dijo: He aquí yo te enseñaré lo que ha de venir en el fin de la ira, porque al tiempo señalado se cumplirá.

Daniel 9:21

aún estaba hablando en oración, y aquel varón Gabriel, al cual había visto en visión al principio, volando con vuelo, me tocó como a la hora del sacrificio de la tarde.

Daniel 10:9-10

Pero oí la voz de sus palabras; y cuando oí la voz de sus palabras, fui adormecido sobre mi rostro, y mi rostro en tierra.

Hechos 12:7

Y he aquí, el ángel del Señor sobrevino, y una luz resplandeció en la cárcel; e hiriendo a Pedro en el lado, le despertó, diciendo: Levántate prestamente. Y las cadenas se le cayeron de las manos.

Hebreos 1:14

¿No son todos espíritus servidores, enviados en servicio por amor de los que son los herederos de la salud?

Hebreos 13:5

Sean las costumbres vuestras sin avaricia, contentos de lo presente (porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré.)

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Sagradas Escrituras (1569)