1 Samuel 12:21

No os apartéis en pos de las vanidades, que no aprovechan ni libran, porque son vanidades.

Habacuc 2:18

¿De qué sirve la escultura que esculpió el que la hizo? ¿La estatua de fundición, que enseña mentira, para que haciendo imágenes mudas confíe el hacedor en su obra?

Jeremías 10:15

vanidad son, obra de escarnios; en el tiempo de su visitación perecerán.

Jeremías 16:19

Oh SEÑOR, fortaleza mía, y fuerza mía, y refugio mío en el tiempo de la aflicción; a ti vendrán gentiles desde los extremos de la tierra, y dirán: Ciertamente mentira poseyeron nuestros padres, vanidad, y no hay en ellos provecho.

1 Corintios 8:4

Acerca, pues, de las viandas que son sacrificadas a los ídolos, sabemos que el ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un sólo Dios.

Deuteronomio 11:16

Guardaos, pues, que vuestro corazón no sea engañado, y os apartéis, y sirváis a dioses ajenos, y os inclinéis a ellos;

Deuteronomio 32:21

Ellos me despertaron a celos con lo que no es Dios; me hicieron ensañar con sus vanidades; y yo también los despertaré a celos con un pueblo que no es pueblo, con gente loca los haré ensañar.

Salmos 115:4-8

Los ídolos de ellos son plata y oro, obra de manos de hombres.

Isaías 41:23-24

Dadnos nuevas de lo que ha de ser después, para que sepamos que vosotros sois dioses; o a lo menos haced bien, o mal, para que tengamos qué contar, y juntamente nos maravillemos.

Isaías 41:29

He aquí, todos son vanidad; y las obras de ellos nada. Viento y confusión son sus vaciadizos.

Isaías 44:9-10

Los formadores de escultura, todos ellos son vanidad, y lo más precioso de ellos para nada es útil; y testigos de ellos, ellos mismos, que ni ven ni entienden; por tanto se avergonzarán.

Isaías 45:20

Reuníos, y venid, allegaos, todos los escapados de los gentiles. No tienen conocimiento los que levantan el madero de su escultura, y los que ruegan al dios, que no salva.

Isaías 46:7

Se lo echan sobre los hombros, lo llevan, y lo sientan en su lugar. Allí se está, y no se mueve de su lugar; le dan voces, y tampoco responde, ni libra de la tribulación.

Jeremías 2:5

Así dijo el SEÑOR: ¿Qué maldad hallaron en mí vuestros padres, que se alejaron de mí, y se fueron tras la vanidad, y se tornaron vanos?

Jeremías 2:13

Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, por cavar para sí cisternas, cisternas rotas que no detienen aguas.

Jeremías 10:8

Y todos se volverán locos y carnales. Enseñanza de vanidades es el mismo leño.

Jeremías 14:22

¿Hay por ventura entre las vanidades de los gentiles quien haga llover? ¿Y los cielos por ventura darán lluvias? ¿No eres tú, SEÑOR, nuestro Dios? En ti, pues, esperamos; porque tú hiciste todas estas cosas.

Jonás 2:8

Los que guardan las vanidades ilusorias, Su misericordia abandonan.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Sagradas Escrituras (1569)