1 Samuel 23:17

Y le dijo: No temas, que no te hallará la mano de Saúl mi padre, y tú reinarás sobre Israel, y yo seré segundo después de ti; y aun Saúl mi padre así lo sabe.

1 Samuel 20:31

Porque todo el tiempo que el hijo de Isaí viviere sobre la tierra, ni tú serás firme, ni tu reino. Envía pues, ahora, y tráemelo, porque ha de morir.

1 Samuel 24:20

Y ahora, como yo entiendo que tú has de reinar, y que el reino de Israel ha de ser en tu mano firme y estable,

Isaías 54:17

Ninguna arma forjada contra ti, prosperará; y tú condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Ésta es la herencia de los siervos de Jehová, y su justicia viene de mí, dice Jehová.

Hebreos 13:6

De manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; y: No temeré lo que me pueda hacer el hombre.

Job 5:11-15

Que pone a los humildes en altura, y a los enlutados levanta a seguridad;

Salmos 27:1-3

«Salmo de David» Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?

Salmos 46:1-2

«Al Músico principal; para los hijos de Coré: Salmo sobre Alamot» Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.

Salmos 91:1-2

El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente.

Proverbios 14:26

En el temor de Jehová está la fuerte confianza; y sus hijos tendrán lugar de refugio.

Proverbios 19:21

Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; mas el consejo de Jehová permanecerá.

Isaías 41:10

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

Isaías 41:14

No temas, gusano de Jacob, ni vosotros, varones de Israel; Yo te ayudaré, dice Jehová tu Redentor, el Santo de Israel.

Lucas 12:32

No temáis, manada pequeña; porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino.

Hechos 5:39

pero si es de Dios, no la podréis deshacer; no seáis tal vez hallados luchando contra Dios.

Hechos 28:16

Y cuando llegamos a Roma, el centurión entregó los presos al prefecto de la guardia, mas a Pablo le fue permitido estar aparte, con un soldado que le guardase.

Romanos 15:24

cuando partiere para España, iré a vosotros, porque espero veros en mi jornada, y que seré encaminado por vosotros hacia allá, si en parte primero hubiere disfrutado de vuestra compañía.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)