2 Timoteo 1:3
Doy gracias a Dios, a quien sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día;
Romanos 1:8-9
Primeramente doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo acerca de todos vosotros, de que en todo el mundo se habla de vuestra fe.
Hechos 23:1
Entonces Pablo, mirando fijamente al concilio, dijo: Varones hermanos, yo con toda buena conciencia he vivido delante de Dios hasta el día de hoy.
Hechos 24:14
Pero te confieso esto, que conforme al Camino que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas;
Hechos 22:3
Yo de cierto soy hombre judío, nacido en Tarso de Cilicia, pero criado en esta ciudad, educado a los pies de Gamaliel, estrictamente conforme a la ley de nuestros padres, siendo celoso de Dios, como hoy lo sois todos vosotros.
Hechos 24:16
Y por esto yo procuro tener siempre una conciencia sin ofensa ante Dios y ante los hombres.
1 Timoteo 1:5
Pues el fin del mandamiento es el amor de corazón puro, y de buena conciencia, y de fe no fingida,
Lucas 2:37
y era viuda como de ochenta y cuatro años, que no se apartaba del templo, sirviendo a Dios de noche y de día con ayunos y oraciones.
Hechos 26:4
Mi vida, pues, desde mi juventud, la cual desde el principio pasé en mi nación, en Jerusalén, la conocen todos los judíos;
Hechos 27:23
Pues esta noche ha estado conmigo el Ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo,
Romanos 9:1
Digo la verdad en Cristo, no miento, y mi conciencia me da testimonio en el Espíritu Santo.
2 Corintios 1:12
Porque ésta es nuestra gloria; el testimonio de nuestra conciencia, que con simplicidad y sinceridad de Dios, no con sabiduría carnal, sino por la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo, y más abundantemente con vosotros.
Gálatas 1:14
y que adelantaba en el judaísmo sobre muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres.
Efesios 1:16
no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo mención de vosotros en mis oraciones,
1 Tesalonicenses 1:2-3
Damos siempre gracias a Dios por todos vosotros, haciendo mención de vosotros en nuestras oraciones;
1 Tesalonicenses 3:10
orando de noche y de día con gran solicitud, que veamos vuestro rostro, y que completemos lo que falta a vuestra fe?
1 Timoteo 1:19
reteniendo la fe y buena conciencia, la cual desechando algunos, naufragaron en cuanto a la fe.
2 Timoteo 1:5
trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual residió primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice; y estoy seguro que en ti también.
2 Timoteo 3:15
y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.
Hebreos 13:8
Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por siempre.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido