Apocalipsis 14:13

Y oí una voz del cielo que me decía: Escribe: Bienaventurados son los muertos, que de aquí en adelante mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, que descansan de sus labores; y sus obras los siguen.

1 Corintios 15:18

Entonces también los que durmieron en el Cristo son perdidos.

1 Tesalonicenses 4:16

Porque el mismo Señor con aclamación, con voz de Arcángel y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en el Cristo resucitarán primero;

Apocalipsis 6:11

Y les fueron dadas sendas ropas blancas, y les fue dicho que aun reposasen todavía un poco de tiempo, hasta que sus compañeros consiervos, sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos fuesen cumplidos.

Apocalipsis 20:6

Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad en éstos; antes serán sacerdotes de Dios y del Cristo, y reinarán con él mil años.

Hebreos 4:9-11

Así que queda el sabatismo para el Pueblo de Dios.

Job 3:17-19

Allí los impíos dejaron el miedo, y allí descansaron los de cansadas fuerzas.

Salmos 19:11

Tu siervo es además amonestado con ellos; en guardarlos hay grande galardón.

Salmos 85:13

La justicia irá delante de él; y pondrá sus pasos en camino.

Eclesiastés 4:1-2

Me volví y vi todas las violencias que se hacen debajo del sol; y he aquí las lágrimas de los oprimidos, y que no tienen consolador; y que la fuerza estaba en la mano de sus opresores, y para ellos no había consolador.

Isaías 35:10

Y los redimidos del SEÑOR volverán, y vendrán a Sion con cánticos; y gozo perpetuo será sobre sus cabezas; y retendrán el gozo, y la alegría, y huirán la tristeza y el gemido.

Isaías 57:1-2

Perece el justo, y no hay quien eche de ver; y los píos son recogidos, y no hay quien entienda que delante de la aflicción es recogido el justo.

Mateo 3:17

Y he aquí una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo amado, en el cual tengo contentamiento.

Mateo 25:35-40

Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui huésped, y me recogisteis;

Lucas 16:9

Y yo os digo: Haceos amigos con las riquezas de maldad, para que cuando éstas falten, seáis recibidos en las moradas eternas.

Lucas 16:25

Y le dijo Abraham: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; mas ahora éste es consolado aquí , y tú atormentado.

Romanos 14:8

Que si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así que, o que vivamos, o que muramos, del Señor somos.

1 Corintios 15:58

Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es vano.

2 Corintios 5:8

mas confiamos, y querremos más peregrinar del cuerpo, y ser presentes al Señor.

Gálatas 6:7-8

No os engañéis, Dios no puede ser burlado; porque todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

Filipenses 1:21-23

Porque para mí el vivir es Cristo y el morir, ganancia.

Filipenses 2:17

Y aun si soy derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y congratulo por todos vosotros.

1 Tesalonicenses 4:14

Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con él a los que durmieron en Jesús.

1 Tesalonicenses 5:10

el cual murió por nosotros, para que sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él.

2 Tesalonicenses 1:6-7

Porque es justo acerca de Dios pagar con tribulación a los que os atribulan;

2 Timoteo 4:7-8

He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.

Hebreos 6:10-11

Porque Dios no es injusto que se olvide de vuestra obra y el trabajo de la caridad que habéis mostrado en su nombre, habiendo ayudado a los santos y ayudándoles.

Apocalipsis 1:11

que decía: YO SOY el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete Iglesias que están en Asia: a Efeso, y a Esmirna, y a Pérgamo, y a Tiatira, y a Sardis, y a Filadelfia, y a Laodicea.

Apocalipsis 2:1

Escribe al ángel de la Iglesia de Efeso: El que tiene las siete estrellas en su diestra, el cual anda en medio de los siete candeleros de oro, dice estas cosas:

Apocalipsis 7:14-17

Y yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han venido de grande tribulación, y han lavado sus luengas ropas, y las han blanqueado en la sangre del Cordero.

Apocalipsis 10:4

Y cuando los siete truenos hubieron hablado sus voces, yo iba a escribir, y oí una voz del cielo, que me decía: Sella las cosas que los siete truenos han hablado, y no las escribas.

Apocalipsis 11:15

Y el séptimo ángel tocó la trompeta. Y fueron hechas grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos de este mundo son reducidos a nuestro Señor y a su Cristo; y reinará para siempre jamás.

Apocalipsis 11:19

Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su Testamento fue vista en su templo. Y fueron hechos relámpagos y voces y truenos y terremotos y grande granizo.

Apocalipsis 16:17

Y el séptimo ángel derramó su copa por el aire; y salió una gran voz del templo del cielo desde el trono, diciendo: Hecho es.

Apocalipsis 19:9

Y él me dice: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son las verdaderas palabras de Dios.

Apocalipsis 21:5

Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Sagradas Escrituras (1569)