Deuteronomio 20:8
Y los oficiales hablarán otra vez al pueblo, y dirán: ¿Quién es hombre medroso y apocado de corazón? Vaya, y vuélvase a su casa, y no apoque el corazón de sus hermanos, como el corazón suyo.
Jueces 7:3
Ahora, pues, haz pregonar, que lo oiga el pueblo, diciendo: El que teme y se estremece, madrugue y vuélvase desde el monte de Galaad. Y se volvieron de los del pueblo veintidós mil; y quedaron diez mil.
Deuteronomio 1:28
¿A dónde subiremos? Nuestros hermanos han hecho desfallecer nuestro corazón, diciendo: Este pueblo es mayor y más alto que nosotros, las ciudades grandes y amuralladas hasta el cielo; y también vimos allí hijos de gigantes.
Hechos 15:37-38
Y Bernabé quería que llevasen consigo a Juan, el que tenía por sobrenombre Marcos;
Éxodo 15:15
Entonces los príncipes de Edom se turbarán; temor sobrecogerá a los valientes de Moab: Se abatirán todos los moradores de Canaán.
Números 13:31-3
Mas los varones que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo; porque es más fuerte que nosotros.
Números 32:9
Que subieron hasta el valle de Escol, y después que vieron la tierra, desanimaron el corazón de los hijos de Israel, para que no viniesen a la tierra que Jehová les había dado.
Deuteronomio 23:9
Cuando salieres a campaña contra tus enemigos, guárdate de toda cosa mala.
Lucas 9:62
Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado y mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.
1 Corintios 15:33
No os engañéis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.
Apocalipsis 3:16
Mas porque eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca.
Apocalipsis 21:8
Pero los temerosos e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras, y todos los mentirosos, tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido