Deuteronomio 23:1
No entrará en la congregación de Jehová el que fuere quebrado, ni el castrado.
Levítico 21:17-21
Habla a Aarón, y dile: Ninguno de tu simiente, por sus generaciones, que tenga algún defecto, se acercará para ofrecer el pan de su Dios.
Levítico 22:22-24
Ciego, o perniquebrado, o mutilado, o verrugoso, o sarnoso o roñoso, no ofreceréis éstos a Jehová, ni de ellos pondréis ofrenda encendida sobre el altar de Jehová.
Deuteronomio 23:2-3
No entrará bastardo en la congregación de Jehová; ni aun en la décima generación entrará en la congregación de Jehová.
Deuteronomio 23:8
Los hijos que nacieren de ellos, a la tercera generación entrarán en la congregación de Jehová.
Nehemías 13:1-3
Aquel día se leyó en el libro de Moisés oyéndolo el pueblo, y fue hallado escrito en él que los amonitas y moabitas no debían entrar jamás en la congregación de Dios;
Isaías 56:3-4
Y el hijo del extranjero, que se ha adherido a Jehová, no hable diciendo: Jehová me apartó totalmente de su pueblo. Ni diga el eunuco: He aquí yo soy árbol seco.
Lamentaciones 1:10
Extendió su mano el enemigo a todas sus cosas preciosas; y ella ha visto entrar en su santuario las gentes, de las cuales mandaste que no entrasen en tu congregación.
Gálatas 3:28
Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido