Deuteronomio 24:10

Cuando prestares alguna cosa a tu prójimo, no entrarás en su casa para tomarle prenda;

Deuteronomio 15:8

Mas abrirás a él tu mano liberalmente, y en efecto le prestarás lo que basta, lo que necesite.

Éxodo 22:27

Porque sólo aquella es su cubierta, es la vestidura para cubrir su piel. ¿En qué dormirá? Y será que cuando él a mí clamare, yo entonces le oiré, porque soy misericordioso.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)