Eclesiastés 1:5

Y sale el sol, y se pone el sol, y se apresura a volver al lugar de donde nace.

Salmos 19:4-6

Por toda la tierra salió su hilo, y hasta el extremo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol.

Génesis 8:22

Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.

Josué 10:13-14

Y el sol se detuvo y la luna se paró, hasta tanto que la gente se hubo vengado de sus enemigos. ¿No está esto escrito en el libro de Jaser? Y el sol se paró en medio del cielo, y no se apresuró a ponerse casi un día entero.

Salmos 42:1

«Al Músico principal: Masquil para los hijos de Coré» Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía.

Salmos 89:36-37

Su simiente será para siempre, y su trono como el sol delante de mí.

Salmos 104:19-23

Hizo la luna para los tiempos; el sol conoce su ocaso.

Jeremías 33:20

Así dice Jehová: Si pudieres invalidar mi pacto con el día y mi pacto con la noche, de manera que no haya día ni noche a su tiempo,

Habacuc 3:11

El sol y la luna se pararon en su estancia; a la luz de tus saetas anduvieron, y al resplandor de tu fulgente lanza.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)