Eclesiastés 1:8

Todas las cosas son fatigosas, más de lo que el hombre puede expresar. No se sacia el ojo de ver, ni el oído se harta de oír.

Proverbios 27:20

El infierno y la perdición nunca se hartan: Así los ojos del hombre nunca se sacian.

Eclesiastés 4:8

Está un hombre solo y sin sucesor; que ni tiene hijo ni hermano; mas nunca cesa de trabajar, ni sus ojos se sacian de sus riquezas, ni se pregunta: ¿Para quién trabajo yo, y privo mi alma del bien? También esto es vanidad, y duro trabajo.

Salmos 63:5

Como de meollo y de grosura será saciada mi alma; y con labios de júbilo te alabará mi boca,

Proverbios 30:15-16

La sanguijuela tiene dos hijas que dicen: Dame, dame. Tres cosas hay que nunca se sacian; aun la cuarta nunca dice: ¡Basta!

Eclesiastés 2:11

Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol.

Eclesiastés 2:26

Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, ciencia y gozo; mas al pecador da el trabajo de recoger y amontonar, para darlo al que agrada a Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

Eclesiastés 4:1-4

Y me volví yo, y vi todas las violencias que se hacen debajo del sol; y he aquí las lágrimas de los oprimidos, sin tener quien los consuele; y la fuerza estaba en la mano de sus opresores, y para ellos no había consolador.

Eclesiastés 5:10-11

El que ama el dinero, no se saciará de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto. También esto es vanidad.

Eclesiastés 7:24-26

Lejos está lo que fue; y lo muy profundo, ¿quién lo hallará?

Mateo 5:6

Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia; porque ellos serán saciados.

Mateo 11:28

Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.

Romanos 8:22-23

Porque sabemos que toda la creación gime a una, y está en dolores de parto hasta ahora;

Apocalipsis 7:16-17

No tendrán más hambre, ni sed; y el sol no caerá más sobre ellos, ni ningún calor;

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)