Eclesiastés 11:10

Por tanto, aparta de tu corazón la congoja y aleja el sufrimiento de tu cuerpo, porque la mocedad y la primavera de la vida son vanidad.

2 Corintios 7:1

Por tanto, amados, teniendo estas promesas, limpiémonos de toda inmundicia de la carne y del espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.

2 Timoteo 2:22

Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue la justicia, la fe, el amor {y} la paz, con los que invocan al Señor con un corazón puro.

Job 13:26

Pues escribes contra mí cosas amargas, y me haces responsable de las iniquidades de mi juventud.

Job 20:11

Sus huesos están llenos de vigor juvenil, mas con él en el polvo yacen.

Salmos 25:7

No te acuerdes de los pecados de mi juventud ni de mis transgresiones; acuérdate de mí conforme a tu misericordia, por tu bondad, oh SEÑOR.

Salmos 39:5

He aquí, tú has hecho mis días muy breves, y mi existencia es como nada delante de ti; ciertamente todo hombre, aun en la plenitud de su vigor, es sólo un soplo. (Selah)

Salmos 90:7-11

Porque hemos sido consumidos con tu ira, y por tu furor hemos sido conturbados.

Proverbios 22:15

La necedad está ligada al corazón del niño; la vara de la disciplina la alejará de él.

Eclesiastés 1:2

Vanidad de vanidades, dice el Predicador, vanidad de vanidades, todo es vanidad.

Eclesiastés 1:14

He visto todas las obras que se han hecho bajo el sol, y he aquí, todo es vanidad y correr tras el viento.

Eclesiastés 12:1

Acuérdate, pues, de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y se acerquen los años en que digas: No tengo en ellos placer;

2 Pedro 3:11-14

Puesto que todas estas cosas han de ser destruidas de esta manera, ¡qué clase de personas no debéis ser vosotros en santa conducta y en piedad,

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido