Ezequiel 47:1
Me hizo tornar luego a la entrada de la Casa; y he aquí aguas que salían de debajo del umbral de la casa hacia el oriente; porque la fachada de la casa estaba al oriente; y las aguas descendían de debajo, hacia el lado derecho de la casa, al mediodía del altar.
Salmos 46:4
Del Río sus conductos alegrarán la ciudad de Dios, el santuario de las tiendas del Altísimo.
Joel 3:18
Y será en aquel tiempo, que los montes destilarán mosto, y los collados fluirán leche, y por todos los arroyos de Judá correrán aguas; y saldrá una fuente de la Casa del SEÑOR, y regará el valle de Sitim.
Apocalipsis 22:1
Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero.
Isaías 55:1
A todos los sedientos: Venid a las aguas. Y los que no tienen dinero, venid, comprad, y comed. Venid, comprad, sin dinero y sin precio, vino y leche.
Zacarías 14:8
Acontecerá también en aquel día, que saldrán de Jerusalén aguas vivas; la mitad de ellas hacia el mar oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en verano y en invierno.
Isaías 30:25
Y sobre todo monte alto, y sobre todo collado subido, habrá ríos, y corrientes de aguas, el día de la gran matanza, cuando caerán las torres.
Jeremías 2:13
Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, por cavar para sí cisternas, cisternas rotas que no detienen aguas.
Ezequiel 41:2
Y la anchura de cada puerta era de diez codos; y los lados de la puerta, de cinco codos de una parte, y cinco de la otra. Y midió su longitud de cuarenta codos, y la anchura de veinte codos.
Zacarías 13:1
En aquel tiempo habrá manantial abierto para la Casa de David y para los moradores de Jerusalén, contra el pecado y contra la inmundicia.
Apocalipsis 22:17
Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiere, tome del agua de la vida gratuitamente.
Isaías 2:3
y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al Monte del SEÑOR, a la Casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra del SEÑOR.
Ezequiel 41:23-26
Y el Templo y el Santuario tenían dos portadas.
Ezequiel 47:12
Y junto al arroyo, en su ribera de una parte y de otra, crecerá todo árbol de fruto de comer; su hoja nunca caerá, ni faltará su fruto; a sus meses madurará, porque sus aguas salen del Santuario; y su fruto será para comer, y su hoja para medicina.
Juan 7:37-39
Mas en el postrer día, el día grande de la Fiesta, se puso de pie y clamó, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido