Filipenses 3:20

Mas nuestra ciudadanía está en el cielo, de donde también esperamos al Salvador, el Señor Jesucristo;

Efesios 2:19

Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y de la familia de Dios;

1 Corintios 1:7

De manera que nada os falta en ningún don; esperando la venida de nuestro Señor Jesucristo;

Hechos 1:11

los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.

Hebreos 12:22

sino que os habéis acercado al monte de Sión, y a la ciudad del Dios vivo, la Jerusalén celestial, y a una compañía innumerable de ángeles,

Salmos 16:11

Me mostrarás la senda de la vida: Plenitud de gozo hay en tu presencia; delicias en tu diestra para siempre.

Salmos 17:15

En cuanto a mí, yo en justicia veré tu rostro; quedaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza.

Salmos 73:24-26

Me has guiado según tu consejo, y después me recibirás en gloria.

Proverbios 15:24

El camino de la vida es hacia arriba al entendido, para apartarse del infierno abajo.

Isaías 26:1-2

En aquel día cantarán este cántico en la tierra de Judá: Fuerte ciudad tenemos; salvación puso Dios por muros y antemuro.

Mateo 6:19-21

No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan.

Mateo 19:21

Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, ve, vende lo que tienes, y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo, y ven y sígueme.

Lucas 12:21

Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.

Lucas 12:32-34

No temáis, manada pequeña; porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino.

Lucas 14:14

y serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar; pues tú serás recompensado en la resurrección de los justos.

2 Corintios 4:18-1

no mirando nosotros a las cosas que se ven, sino a las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, mas las que no se ven son eternas.

2 Corintios 5:8

Estamos confiados, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes con el Señor.

Gálatas 4:26

Mas la Jerusalén de arriba es libre; la cual es la madre de todos nosotros.

Efesios 2:6

y juntamente con Él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar con Él, en lugares celestiales en Cristo Jesús;

Filipenses 1:10

para que aprobéis lo mejor, a fin de que seáis sinceros e irreprensibles para el día de Cristo;

Filipenses 1:18-21

¿Qué, pues? Que no obstante, de todas maneras, o por pretexto o por verdad, Cristo es predicado; y en esto me gozo, y me gozaré aún.

Colosenses 1:5

por la esperanza que os está guardada en el cielo, de la cual habéis oído por la palabra verdadera del evangelio,

Colosenses 3:1-3

Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.

1 Tesalonicenses 1:10

y esperar del cielo a su Hijo, al cual resucitó de los muertos; a Jesús, el cual nos libró de la ira que ha de venir.

1 Tesalonicenses 4:16

Porque el Señor mismo con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.

2 Tesalonicenses 1:7-8

y a vosotros, que sois atribulados, daros reposo con nosotros, cuando sea revelado del cielo el Señor Jesús con sus ángeles poderosos,

2 Timoteo 4:8

Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.

Tito 2:13

Aguardando aquella esperanza bienaventurada, y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,

Hebreos 9:28

Así también Cristo fue ofrecido una sola vez, para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación de los que le esperan.

Hebreos 10:34-35

Y os compadecisteis de mí en mis cadenas, y el despojo de vuestros bienes padecisteis con gozo, sabiendo en vosotros que tenéis una mejor y perdurable sustancia en los cielos.

1 Pedro 1:3-4

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos;

2 Pedro 3:12-14

Esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, siendo encendidos, serán deshechos, y los elementos siendo quemados, se fundirán.

Apocalipsis 1:7

He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron, y todos los linajes de la tierra harán lamentación a causa de Él. Así sea. Amén.

Apocalipsis 21:10-27

Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de Jerusalén, que descendía del cielo de Dios,

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)