Gálatas 3:11

Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente; porque: El justo por la fe vivirá,

Habacuc 2:4

He aquí se enorgullece aquel cuya alma no es recta en él; mas el justo por su fe vivirá.

Romanos 1:17

Porque en él la justicia de Dios es revelada de fe en fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.

Gálatas 2:16

sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada.

Hebreos 10:38

Mas el justo vivirá por fe; y si retrocediere, no agradará a mi alma.

1 Reyes 8:46

Si hubieren pecado contra ti (porque no hay hombre que no peque), y tú estuvieres airado contra ellos, y los entregares delante del enemigo, para que los cautiven y lleven a tierra enemiga, sea lejos o cerca,

Job 9:3

Si quisiere contender con Él, no le podrá responder a una cosa de mil.

Job 40:4

He aquí que yo soy vil, ¿qué te responderé? Mi mano pongo sobre mi boca.

Job 42:6

Por tanto me aborrezco, y me arrepiento en polvo y en ceniza.

Salmos 19:12

¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos.

Salmos 130:3-4

Jehová, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh Señor, quedaría en pie?

Salmos 143:2

Y no entres en juicio con tu siervo; porque no se justificará delante de ti ningún viviente.

Eclesiastés 7:20

Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque.

Isaías 6:5

Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.

Isaías 53:6

Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en Él el pecado de todos nosotros.

Isaías 64:6

Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento.

Santiago 3:2

Porque todos ofendemos en muchas cosas. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

1 Juan 1:8-10

Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.

Apocalipsis 5:9

Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y nos has redimido para Dios con tu sangre, de todo linaje y lengua y pueblo y nación;

Apocalipsis 7:14-15

Y yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Éstos son los que han salido de gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)