Gálatas 4:21

Decidme, los que deseáis estar bajo {la} ley, ¿no oís a la ley?

Mateo 21:42-44

Jesús les dijo*: ¿Nunca leísteis en las Escrituras: ``LA PIEDRA QUE DESECHARON LOS CONSTRUCTORES, ESA, EN PIEDRA ANGULAR SE HA CONVERTIDO; ESTO FUE HECHO DE PARTE DEL SEÑOR, Y ES MARAVILLOSO A NUESTROS OJOS"?

Mateo 22:29-32

Pero Jesús respondió y les dijo: Estáis equivocados por no comprender las Escrituras ni el poder de Dios.

Juan 5:46-47

Porque si creyerais a Moisés, me creeríais a mí, porque de mí escribió él.

Juan 10:34

Jesús les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: ``YO DIJE: SOIS DIOSES"?

Juan 12:34

Entonces la multitud le respondió: Hemos oído en la ley que el Cristo permanecerá para siempre; ¿y cómo dices tú: ``El Hijo del Hombre tiene que ser levantado"? ¿Quién es este Hijo del Hombre?

Juan 15:25

Pero {han hecho esto} para que se cumpla la palabra que está escrita en su ley: ``ME ODIARON SIN CAUSA."

Romanos 3:19

Ahora bien, sabemos que cuanto dice la ley, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda boca se calle y todo el mundo sea hecho responsable ante Dios;

Romanos 6:14

Porque el pecado no tendrá dominio sobre vosotros, pues no estáis bajo la ley sino bajo la gracia.

Romanos 7:5-6

Porque mientras estábamos en la carne, las pasiones pecaminosas {despertadas} por la ley, actuaban en los miembros de nuestro cuerpo a fin de llevar fruto para muerte.

Romanos 9:30-32

¿Qué diremos entonces? Que los gentiles, que no iban tras la justicia, alcanzaron justicia, es decir, la justicia que es por fe;

Romanos 10:3-10

Pues desconociendo la justicia de Dios y procurando establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios.

Gálatas 3:10

Porque todos los que son de las obras de {la} ley están bajo maldición, pues escrito está: MALDITO TODO EL QUE NO PERMANECE EN TODAS LAS COSAS ESCRITAS EN EL LIBRO DE LA LEY, PARA HACERLAS.

Gálatas 3:23-24

Y antes de venir la fe, estábamos encerrados bajo la ley, confinados para la fe que había de ser revelada.

Gálatas 4:9

Pero ahora que conocéis a Dios, o más bien, que sois conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis otra vez a las cosas débiles, inútiles y elementales, a las cuales deseáis volver a estar esclavizados de nuevo?

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido