Génesis 21:10
Por tanto dijo a Abraham: Echa a esta sierva y a su hijo; pues el hijo de esta sierva no ha de heredar con mi hijo, con Isaac.
Juan 8:35
Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el Hijo sí permanece para siempre.
1 Juan 2:19
Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros.
Génesis 17:19
Y respondió Dios: Ciertamente Sara tu esposa te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y confirmaré mi pacto con él, y con su simiente después de él por pacto perpetuo.
Génesis 17:21
Mas yo estableceré mi pacto con Isaac, el cual Sara te dará a luz por este tiempo el año siguiente.
Génesis 20:11
Y Abraham respondió: Porque dije para mí: Cierto no hay temor de Dios en este lugar, y me matarán por causa de mi esposa.
Génesis 22:10
Y extendió Abraham su mano, y tomó el cuchillo, para degollar a su hijo.
Génesis 25:6
Y a los hijos de sus concubinas dio Abraham dones, y los envió lejos de Isaac su hijo, cuando aún él vivía, hacia el oriente, a la tierra oriental.
Génesis 25:19
Y éstas son las generaciones de Isaac, hijo de Abraham. Abraham engendró a Isaac.
Génesis 36:6-7
Y Esaú tomó sus esposas, sus hijos y sus hijas, y todas las personas de su casa, y sus ganados, y todas sus bestias, y todos sus bienes que había adquirido en la tierra de Canaán, y se fue a otra tierra, lejos de su hermano Jacob.
Mateo 8:11-12
Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos.
Mateo 22:13
Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, llevadle y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Gálatas 3:18
Porque si la herencia fuese por la ley, ya no sería por la promesa: Mas Dios la dio a Abraham por la promesa.
Gálatas 4:7
Así que ya no eres siervo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por Cristo.
Gálatas 4:22-31
Porque está escrito que Abraham tuvo dos hijos; uno de la sierva, y otro de la libre.
1 Pedro 1:4
para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en el cielo para vosotros,
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido