Génesis 24:67

Y la introdujo Isaac a la tienda de su madre Sara, y tomó a Rebeca por esposa; y la amó. Y se consoló Isaac después de la muerte de su madre.

Génesis 37:35

Y se levantaron todos sus hijos y todas sus hijas para consolarlo; pero él no quiso recibir consuelo, y dijo: Porque yo descenderé enlutado a mi hijo hasta la sepultura. Y lo lloró su padre.

Génesis 38:12

Y pasaron muchos días, y murió la hija de Súa, esposa de Judá; y Judá se consoló, y subía a los trasquiladores de sus ovejas a Timnat, él y su amigo Hira el adulamita.

Génesis 2:22-24

Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.

Génesis 18:6

Entonces Abraham fue de prisa a la tienda a Sara, y le dijo: Toma presto tres medidas de flor de harina, amasa y haz panes cocidos debajo del rescoldo.

Génesis 18:9-10

Y le dijeron: ¿Dónde está Sara tu esposa? Y él respondió: Aquí en la tienda.

Génesis 23:1-2

Y fue la vida de Sara ciento veintisiete años; tantos fueron los años de la vida de Sara.

Génesis 25:20

Y era Isaac de cuarenta años cuando tomó por esposa a Rebeca, hija de Betuel arameo de Padan-aram, hermana de Labán arameo.

Génesis 29:18

Y Jacob amó a Raquel, y dijo: Yo te serviré siete años por Raquel tu hija menor.

Cantares 8:2

Yo te llevaría, te metería en la casa de mi madre, que me enseñaba; te daría a beber vino sazonado del mosto de mis granadas.

Isaías 54:1-5

Alégrate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción, y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de la dejada que los de la casada, dice Jehová.

2 Corintios 11:1-2

¡Quiera Dios que toleraseis un poco mi locura! En verdad, toleradme.

Efesios 5:22-33

Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor.

1 Tesalonicenses 4:13

Mas no quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.

1 Tesalonicenses 4:15

Por lo cual, os decimos esto por palabra del Señor; que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)