Génesis 27:34

Cuando Esaú oyó las palabras de su padre, clamó con una muy grande y muy amarga exclamación, y le dijo a su padre: Bendíceme también a mí, padre mío.

Hebreos 12:17

Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue reprobado, que no halló lugar de arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.

1 Samuel 30:4

Entonces David y el pueblo que estaba con él, alzaron su voz y lloraron, hasta que les faltaron las fuerzas para llorar.

Proverbios 1:24-28

Por cuanto llamé, y no quisisteis; extendí mi mano, y no hubo quien escuchara;

Proverbios 1:31

Comerán, pues, del fruto de su camino, y de sus consejos se hartarán.

Proverbios 19:3

La locura del hombre tuerce su camino; y contra el SEÑOR se aíra su corazón.

Lucas 13:24-28

Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.

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