Génesis 48:10
Los ojos de Israel estaban {tan} débiles por la vejez {que} no podía ver. Entonces {José} se los acercó, y él los besó y los abrazó.
Génesis 27:1
Y aconteció que siendo ya viejo Isaac, y sus ojos demasiado débiles para ver, llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo: ``Hijo mío." ``Aquí estoy," le respondió Esaú.
Génesis 27:27
Jacob se acercó y lo besó; y al notar el olor de sus vestidos, Isaac lo bendijo, diciendo: ``Ciertamente el olor de mi hijo Es como el aroma de un campo que el SEÑOR ha bendecido.
Génesis 31:55
Labán se levantó muy de mañana, besó a sus hijos y a sus hijas, y los bendijo. Entonces Labán se fue y regresó a su lugar.
Génesis 45:15
Y besó a todos sus hermanos, y lloró sobre ellos. Después sus hermanos hablaron con él.
1 Samuel 3:2
Y aconteció un día, estando Elí acostado en su aposento (sus ojos habían comenzado a oscurecerse {y} no podía ver {bien}),
1 Samuel 4:15
Elí tenía noventa y ocho años, sus ojos se habían cegado y no podía ver.
1 Reyes 19:20
Dejando él los bueyes, corrió tras Elías, y dijo: ``Permítame besar a mi padre y a mi madre, entonces lo seguiré." Y él le dijo: ``Ve, vuélvete, pues, ¿qué te he hecho yo?"
Isaías 6:10
Haz insensible el corazón de este pueblo, Endurece sus oídos, Y nubla sus ojos, No sea que vea con sus ojos, Y oiga con sus oídos, Y entienda con su corazón, Y se arrepienta y sea curado."
Isaías 59:1
La mano del SEÑOR no se ha acortado para salvar; Ni Su oído se ha endurecido para oír.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido