Génesis 9:5

Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre.

Éxodo 21:28-29

Si un buey acorneare hombre o mujer, y a causa de ello muriere, el buey será apedreado, y no se comerá su carne; mas el dueño del buey será absuelto.

Génesis 4:9-10

Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Acaso soy yo guarda de mi hermano?

Éxodo 21:12

El que hiriere a alguno, haciéndole así morir, él morirá.

Éxodo 20:13

No matarás.

Levítico 19:16

No andarás chismeando entre tu pueblo. No te pondrás contra la sangre de tu prójimo: Yo Jehová.

Números 35:31-33

Y no tomaréis precio por la vida del homicida; porque está condenado a muerte: mas indefectiblemente morirá.

Deuteronomio 21:1-9

Y si en la tierra que Jehová tu Dios te da para que la poseas, fuere hallado alguien muerto, tendido en el campo, y no se supiere quién lo mató,

Salmos 9:12

Cuando demandó la sangre, se acordó de ellos; no se olvidó del clamor de los pobres.

Mateo 23:35

para que venga sobre vosotros toda la sangre justa que ha sido derramada sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo, hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, al cual matasteis entre el templo y el altar.

Hechos 17:26

Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los términos de su habitación;

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)