Hageo 1:12
Entonces Zorobabel, hijo de Salatiel, el sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y todo el remanente del pueblo, obedecieron la voz del SEÑOR su Dios y las palabras del profeta Hageo, como el SEÑOR su Dios le había mandado. Y temió el pueblo delante del SEÑOR.
Isaías 50:10
¿Quién hay entre ustedes que tema al SEÑOR, Que oiga la voz de Su siervo, Que ande en tinieblas y no tenga luz? Confíe en el nombre del SEÑOR y apóyese en su Dios.
Hageo 1:14
Y el SEÑOR despertó el espíritu de Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el espíritu del sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y el espíritu de todo el remanente del pueblo. Así que vinieron y comenzaron la obra en la casa del SEÑOR de los ejércitos, su Dios,
Esdras 5:2
Zorobabel, hijo de Salatiel, y Jesúa, hijo de Josadac, se levantaron entonces y comenzaron a reedificar la casa de Dios en Jerusalén; y los profetas de Dios estaban con ellos apoyándolos.
Hageo 2:2
``Habla ahora a Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y al sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y al remanente del pueblo:
Génesis 22:12
Y {el ángel} dijo: ``No extiendas tu mano contra el muchacho, ni le hagas nada. Porque ahora sé que temes (reverencias) a Dios, ya que no Me has rehusado tu hijo, tu único."
Deuteronomio 31:12
"Congrega al pueblo, hombres, mujeres y niños, y al extranjero que está en tu ciudad, para que escuchen, aprendan a temer al SEÑOR tu Dios, y cuiden de observar todas las palabras de esta ley.
Salmos 112:1
¡Aleluya! Cuán bienaventurado es el hombre que teme al SEÑOR, Que mucho se deleita en Sus mandamientos.
Proverbios 1:7
El temor del (La reverencia al) SEÑOR es el principio de la sabiduría; Los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.
Eclesiastés 12:13
La conclusión, cuando todo se ha oído, {es ésta:} Teme a Dios y guarda Sus mandamientos, Porque esto {concierne} a toda persona.
Isaías 55:10-11
Porque como descienden de los cielos la lluvia y la nieve, Y no vuelven allá sino que riegan la tierra, Haciéndola producir y germinar, Dando semilla al sembrador y pan al que come,
Hageo 1:1
El año segundo del rey Darío, en el mes sexto, el día primero del mes, vino la palabra del SEÑOR por medio del profeta Hageo a Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y al sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac:
Hechos 9:31
Entretanto la iglesia gozaba de paz por toda Judea, Galilea y Samaria, y era edificada; y andando en el temor del Señor y en la fortaleza del Espíritu Santo, seguía creciendo.
Colosenses 1:6
que ha llegado hasta ustedes. Así como en todo el mundo está dando fruto constantemente y creciendo, así {lo ha estado haciendo} también en ustedes, desde el día que oyeron y comprendieron la gracia de Dios en verdad.
1 Tesalonicenses 1:5-6
porque nuestro evangelio no vino a ustedes solamente en palabras, sino también en poder y en el Espíritu Santo y con plena convicción; como saben qué clase de personas demostramos ser entre ustedes por el amor que les tenemos.
1 Tesalonicenses 2:13-14
Por esto también nosotros sin cesar damos gracias a Dios de que cuando recibieron la palabra de Dios que oyeron de nosotros, {la} aceptaron no {como} la palabra de hombres, sino como lo que realmente es, la palabra de Dios, la cual también hace su obra en ustedes los que creen.
Hebreos 12:28
Por lo cual, puesto que recibimos un reino que es inconmovible, demostremos (tengamos) gratitud, mediante la cual ofrezcamos a Dios un servicio aceptable con temor y reverencia;
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido