Hechos 12:6
Y esa noche, cuando Herodes estaba a punto de sacarlo, Pedro estaba durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas; y unos guardias delante de la puerta custodiaban la cárcel.
Hechos 21:33
Entonces el comandante llegó y lo prendió, y ordenó que lo ataran con dos cadenas; y preguntaba quién era y qué había hecho.
Génesis 22:14
Y llamó Abraham aquel lugar con el nombre de El SEÑOR Proveerá, como se dice hasta hoy: En el monte del SEÑOR se proveerá.
Deuteronomio 32:26
``Yo hubiera dicho: `Los haré pedazos, borraré la memoria de ellos de entre los hombres',
1 Samuel 23:26-27
Saúl iba por un lado del monte y David y sus hombres por el otro lado del monte; y David se apresuraba para huir de Saúl, pues Saúl y sus hombres estaban rodeando a David y a sus hombres para apresarlos.
Salmos 3:5-6
Yo me acosté y me dormí; desperté, pues el SEÑOR me sostiene.
Salmos 4:8
En paz me acostaré y así también dormiré; porque sólo tú, SEÑOR, me haces habitar seguro.
Isaías 26:3-4
Al de firme propósito guardarás en perfecta paz, porque en ti confía.
Jeremías 40:4
Mas ahora, he aquí, hoy te libro de las cadenas que están en tus manos. Si te parece bien venir conmigo a Babilonia, ven, y yo te cuidaré; pero si te parece mal venir conmigo a Babilonia, no te preocupes. Mira, toda la tierra está delante de ti; ve adonde mejor y más conveniente te parezca ir.
Mateo 28:4
y de miedo a él los guardias temblaron y se quedaron como muertos.
Hechos 5:23
diciendo: Encontramos la cárcel cerrada con toda seguridad y los guardias de pie a las puertas; pero cuando abrimos, a nadie hallamos dentro.
Hechos 28:20
Por tanto, por esta razón he pedido veros y hablaros, porque por causa de la esperanza de Israel llevo esta cadena.
Efesios 6:20
por el cual soy embajador en cadenas; que {al proclamar}lo hable con denuedo, como debo hablar.
Filipenses 4:6-7
Por nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios.
2 Timoteo 1:16
Conceda el Señor misericordia a la casa de Onesíforo, porque muchas veces me dio refrigerio y no se avergonzó de mis cadenas,
Hebreos 13:6
de manera que decimos confiadamente: EL SEÑOR ES EL QUE ME AYUDA; NO TEMERE. ¿QUE PODRA HACERME EL HOMBRE?
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido