Hechos 16:13
Y en el día de reposo salimos fuera de la puerta, a la orilla de un río, donde pensábamos que habría un lugar de oración; nos sentamos y comenzamos a hablar a las mujeres que se habían reunido.
Hechos 13:14
mas ellos, saliendo de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidia; y en el día de reposo entraron a la sinagoga y se sentaron.
Mateo 5:1-2
Y cuando vio las multitudes, subió al monte; y después de sentarse, sus discípulos se acercaron a El.
Mateo 13:2
Y se congregaron {junto} a El grandes multitudes, por lo que subió a una barca y se sentó; y toda la multitud estaba de pie en la playa.
Marcos 16:15
Y les dijo:
Lucas 4:20-21
Cerrando el libro, {lo} devolvió al asistente y se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en El.
Lucas 13:10
{Jesús} estaba enseñando en una de las sinagogas un día de reposo,
Juan 8:2
Y al amanecer, vino otra vez al templo, y todo el pueblo venía a El; y sentándose, les enseñaba.
Hechos 13:42
Al salir Pablo y Bernabé, la gente les rogaba que el siguiente día de reposo les hablaran de estas cosas.
Hechos 16:6
Pasaron por la región de Frigia y Galacia, habiendo sido impedidos por el Espíritu Santo de hablar la palabra en Asia,
Hechos 17:2
Y Pablo, según su costumbre, fue a ellos y por tres días de reposo discutió con ellos {basándose} en las Escrituras,
Hechos 18:4
Y discutía en la sinagoga todos los días de reposo, y trataba de persuadir a judíos y a griegos.
Hechos 20:7
Y el primer {día} de la semana, cuando estábamos reunidos para partir el pan, Pablo les hablaba, pensando partir al día siguiente, y prolongó su discurso hasta la medianoche.
Hechos 21:5
Y pasados aquellos días partimos y emprendimos nuestro viaje mientras que todos ellos, con sus mujeres e hijos, nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad. Después de arrodillarnos y orar en la playa, nos despedimos unos de otros.
Gálatas 3:28
No hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay hombre ni mujer; porque todos sois uno en Cristo Jesús.
Colosenses 1:23
si en verdad permanecéis en la fe bien cimentados y constantes, sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído, que fue proclamado a toda la creación debajo del cielo, y del cual yo, Pablo, fui hecho ministro.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido