Parallel Verses
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Pedro y Juan subían juntos al Templo a la hora novena, la de la oración.
La Biblia de las Américas
Y {cierto día} Pedro y Juan subían al templo a la hora novena, la de la oración.
Reina Valera 1909
PEDRO y Juan subían juntos al templo á la hora de oración, la de nona.
La Nueva Biblia de los Hispanos
{Cierto día} Pedro y Juan subían al templo a la hora novena (3 p.m.), la hora de la oración.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Pedro y Juan subían juntos al Templo a la hora novena, la de la oración.
Spanish: Reina Valera Gómez
Y Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración.
New American Standard Bible
Now Peter and John were going up to the temple at the ninth hour, the hour of prayer.
Artículos
Referencias Cruzadas
Salmos 55:17
Tarde y mañana y a mediodía hablo y bramo; y él oirá mi voz.
Hechos 10:30
Entonces Cornelio dijo: Hace cuatro días hasta esta hora yo estaba en ayuno; y a la hora novena mientras oraba en mi casa, he aquí un varón se puso delante de mí en vestido resplandeciente.
Hechos 2:46
Y perseverando unánimes cada día en el Templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y con sencillez de corazón,
Hechos 10:3
Este vio en visión manifiestamente, como a la hora novena del día, que un ángel de Dios entraba a él, y le decía: Cornelio.
Éxodo 29:39
Ofrecerás un cordero en la mañana, y el otro cordero ofrecerás a la caída de la tarde.
Números 28:4
Un cordero ofrecerás por la mañana, y el otro cordero ofrecerás entre las dos tardes;
1 Reyes 18:36
Y cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto de la tarde, se acercó el profeta Elías, y dijo: SEÑOR Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas.
Daniel 6:10
Y Daniel, cuando supo que la escritura estaba firmada, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cenadero que estaban hacia Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, y oraba, y confesaba delante de su Dios, como lo solía hacer antes.
Daniel 9:21
aún estaba hablando en oración, y aquel varón Gabriel, al cual había visto en visión al principio, volando con vuelo, me tocó como a la hora del sacrificio de la tarde.
Mateo 17:1
Y después de seis días, Jesús toma a Pedro, y a Jacobo, y a Juan su hermano, y los lleva aparte a un monte alto;
Mateo 26:37
Y tomando a Pedro, y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse en gran manera.
Lucas 1:10
Y toda la multitud del pueblo estaba fuera orando a la hora del incienso.
Lucas 22:8
Y envió a Pedro y a Juan, diciendo: Id, aparejadnos el cordero de la pascua para que comamos.
Lucas 23:44-46
Y cuando era como la hora sexta, fueron hechas tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena.
Lucas 24:53
y estaban siempre en el Templo, alabando y bendiciendo a Dios. Amén.
Juan 13:23-25
Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba sentado en la mesa al lado de Jesús.
Juan 20:2-9
Entonces corrió, y vino a Simón Pedro, y al otro discípulo, al cual amaba Jesús, y les dice: Han llevado al Señor del sepulcro, y no sabemos dónde le han puesto.
Juan 21:7
Dijo entonces aquel discípulo, al cual amaba Jesús, a Pedro: El Señor es. Entonces Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa, porque estaba desnudo, y se echó al mar.
Juan 21:18-22
De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas donde querías; mas cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te pasará donde no quieras.
Hechos 4:13
Entonces viendo la constancia de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras e ignorantes, se maravillaban; y les conocían que habían estado con Jesús.
Hechos 5:25
Pero viniendo uno, les dio esta noticia: He aquí, los varones que echasteis en la cárcel, están en el Templo, y enseñan al pueblo.
Hechos 8:14
Y los apóstoles que estaban en Jerusalén, habiendo oído que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan;
Gálatas 2:9
y como vieron la gracia que me era dada, Jacobo, Cefas y Juan, que parecían ser las columnas, nos dieron la diestra de compañía a mí y a Bernabé, para que nosotros fuéramos a los gentiles, y ellos a la circuncisión.