Hechos 3:23

Y será, que toda alma que no oyere a aquel Profeta, será desarraigada del pueblo.

Deuteronomio 18:19

Y sucederá que a cualquiera que no escuche mis palabras que Él ha de hablar en mi nombre, yo lo llamaré a cuentas.

Levítico 23:29

Porque toda persona que no se afligiere en este mismo día, será cortada de entre su pueblo.

Marcos 16:16

El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.

Juan 3:18-20

El que en Él cree, no es condenado, pero el que no cree, ya es condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

Juan 8:24

Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis.

Juan 12:48

El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ésta le juzgará en el día final.

Hechos 13:38-41

Os sea, pues, notorio, varones hermanos, que por Éste os es predicado el perdón de pecados,

2 Tesalonicenses 1:7-9

y a vosotros, que sois atribulados, daros reposo con nosotros, cuando sea revelado del cielo el Señor Jesús con sus ángeles poderosos,

Hebreos 2:3

¿cómo escaparemos nosotros, si tuviéremos en poco una salvación tan grande? La cual, habiendo sido publicada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que le oyeron;

Hebreos 10:28-30

El que menospreciare la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere sin ninguna misericordia.

Hebreos 10:39

Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que creen para salvación del alma.

Hebreos 12:25

Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que hablaba en la tierra, mucho menos nosotros, si desecháramos al que habla desde el cielo.

Apocalipsis 13:8

Y le adorarán todos los moradores de la tierra cuyos nombres no están escritos en el libro de la vida del Cordero, el cual fue inmolado desde la fundación del mundo.

Apocalipsis 20:15

Y el que no fue hallado escrito en el libro de la vida fue lanzado en el lago de fuego.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)