Hechos 9:13

Entonces Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, de cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén;

Hechos 8:3

Y Saulo asolaba la iglesia entrando de casa en casa, y arrastrando hombres y mujeres los entregaba en la cárcel.

Hechos 9:1

Y Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, fue al sumo sacerdote,

Éxodo 4:13-19

Y él dijo: ¡Ay Señor! envía por mano del que has de enviar.

1 Samuel 16:2

Y dijo Samuel: ¿Cómo iré? Si Saúl lo entendiere, me matará. Jehová respondió: Toma contigo una becerra de la vacada, y di: He venido para ofrecer sacrificio a Jehová.

1 Reyes 18:9-14

Pero él dijo: ¿En qué he pecado, para que tú entregues a tu siervo en mano de Acab para que me mate?

Jeremías 20:9-10

Y dije: No me acordaré más de Él, ni hablaré más en su nombre: Pero su palabra fue en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos, traté de sufrirlo, y no pude.

Ezequiel 3:14

Me levantó, pues, el Espíritu, y me tomó; y fui en amargura, en la indignación de mi espíritu; mas la mano de Jehová era fuerte sobre mí.

Jonás 1:2-3

Levántate, y ve a Nínive, la gran ciudad, y pregona contra ella; porque su maldad ha subido delante de mí.

Mateo 10:16

He aquí yo os envío como ovejas en medio de lobos; sed, pues, sabios como serpientes, y sencillos como palomas.

Hechos 9:32

Y aconteció que Pedro, visitando a todos, vino también a los santos que habitaban en Lida.

Hechos 22:4

Y perseguí este Camino hasta la muerte, prendiendo y entregando en cárceles así hombres como mujeres;

Hechos 22:19-20

Y yo dije: Señor, ellos saben que yo encarcelaba, y azotaba por las sinagogas a los que creían en ti;

Hechos 26:10-11

lo cual también hice en Jerusalén, y yo encerré en cárceles a muchos de los santos, habiendo recibido autoridad de los príncipes de los sacerdotes; y cuando los mataron, yo di mi voto.

Romanos 1:7

A todos los que estáis en Roma, amados de Dios, llamados a ser santos. Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.

Romanos 15:25-26

Mas ahora voy a Jerusalén para ministrar a los santos.

Romanos 15:31

Para que sea librado de los incrédulos que están en Judea, y la ofrenda de mi servicio la cual traigo para Jerusalén sea acepta a los santos;

Romanos 16:2

que la recibáis en el Señor, como es digno de los santos, y que la ayudéis en cualquier cosa que necesite de vosotros, porque ella ha ayudado a muchos, y a mí mismo también.

Romanos 16:15

Saludad a Filólogo y a Julia, a Nereo y a su hermana, y a Olimpas, y a todos los santos que están con ellos.

1 Timoteo 1:13-15

habiendo yo sido antes blasfemo, y perseguidor e injuriador; mas fui recibido a misericordia porque lo hice por ignorancia, en incredulidad.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)