Isaías 1:7
Vuestra tierra está destruida, vuestras ciudades puestas a fuego, vuestra tierra delante de vosotros comida de extranjeros, y asolada como asolamiento de extraños.
Levítico 26:34
Entonces la tierra reposará sus sábados todos los días que estuviere asolada, mientras vosotros estéis en la tierra de vuestros enemigos; la tierra descansará entonces y gozará sus sábados.
Isaías 6:11
Y yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? Y respondió él: Hasta que las ciudades estén asoladas, y sin morador, ni hombre en las casas, y la tierra sea tornada en desierto;
Deuteronomio 28:33
El fruto de tu tierra y todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y solamente serás oprimido y quebrantado todos los días.
Deuteronomio 28:43
El extranjero que estará en medio de ti subirá sobre ti muy alto, y tú descenderás muy abajo.
Deuteronomio 28:48-52
servirás, por tanto, a tus enemigos que enviare el SEÑOR contra ti, con hambre y con sed y con desnudez, y con falta de todas las cosas; y él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte.
2 Crónicas 28:5
Por lo cual el SEÑOR su Dios lo entregó en manos del rey de los sirios, los cuales le derrotaron, y cogieron de él una grande presa, que llevaron a Damasco. Fue también entregado en manos del rey de Israel, el cual lo hirió con gran mortandad.
2 Crónicas 28:16-21
En aquel tiempo envió a pedir el rey Acaz a los reyes de Asiria que le ayudasen.
Salmos 107:34
la tierra fructífera en salados; por la maldad de los que la habitan.
Salmos 107:39
Y después son menoscabados, y abatidos de tiranía; de males y congojas.
Isaías 5:5-6
Os mostraré, pues, ahora lo que haré yo a mi viña: Le quitaré su vallado, y será para ser consumida; aportillaré su cerca, y será para ser hollada;
Isaías 5:9
Ha llegado a mis oídos de parte del SEÑOR de los ejércitos, que las muchas casas han de quedar asoladas, sin morador las grandes y hermosas.
Isaías 5:17
Y los corderos serán apacentados según su costumbre; y extraños comerán las gruesas desamparadas.
Isaías 9:5
Porque toda batalla de quien pelea es con estruendo, y con revolcamiento de vestidura en sangre; mas ésta será con quema, y tragamiento de fuego.
Isaías 24:10-12
Quebrantada es la ciudad de la vanidad; toda casa se ha cerrado, para que no entre nadie.
Isaías 34:9
Y sus arroyos se tornarán en brea; y su polvo en azufre; y su tierra en brea ardiente.
Jeremías 2:15
Los cachorros de los leones bramaron sobre él, dieron su voz; y pusieron su tierra en soledad; desiertas están sus ciudades, sin morador.
Jeremías 6:8
Castiga Jerusalén, para que por ventura no se aparte mi alma de ti, para que por ventura no te torne desierta, tierra no habitada.
Lamentaciones 5:2
Nuestra heredad se ha vuelto a extraños, nuestras casas a forasteros.
Ezequiel 30:12
Y secaré los ríos, y entregaré la tierra en manos de malos, y destruiré la tierra y su plenitud por mano de extranjeros; yo, el SEÑOR, he hablado.
Oseas 7:9
Comieron extraños su sustancia, y él no lo supo; y aun vejez se ha esparcido por él, y él no lo entendió.
Oseas 8:7
Porque sembraron viento, y torbellino segarán; no tendrán mies, ni el fruto hará harina; si la hiciere, extraños la tragarán.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido