sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío.

Él convertirá el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres; no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición.

Perecen por el aliento de Dios, y por el soplo de su furor son consumidos.

Los quebrantarás con vara de hierro; como vaso de alfarero los desmenuzarás.

El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ha ungido Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;

Y entonces será revelado aquel inicuo, al cual el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida;

Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre; cetro de equidad es el cetro de tu reino.

Lo dilatado de su imperio y de su paz no tendrá límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.

Los humildes aumentarán su alegría en Jehová, y los pobres de entre los hombres se gozarán en el Santo de Israel.

Porque Tofet ya de tiempo está dispuesta y preparada para el rey, Él la hizo profunda y ancha; cuya pira es de fuego, y mucha leña; el soplo de Jehová, como torrente de azufre, la enciende.

He aquí que en justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio.

Que no hablen mal de nadie, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres.

Y de su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones; y Él las regirá con vara de hierro; y Él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.

Y reinó David sobre todo Israel; y David administraba derecho y justicia a todo su pueblo.

El Espíritu de Jehová ha hablado por mí, y su palabra ha sido en mi lengua.

Bienaventurados tus varones, dichosos estos tus siervos, que están continuamente delante de ti, y oyen tu sabiduría.

Humo subió de su nariz, y de su boca fuego consumidor; carbones fueron por Él encendidos.

«Para Salomón» Oh Dios, da tus juicios al rey, y tu justicia al hijo del rey.

Porque él librará al menesteroso que clamare, y al afligido que no tuviere quien le socorra.

¿Hasta cuándo juzgaréis injustamente, y aceptaréis las personas de los impíos? (Selah)

Jehová enviará desde Sión la vara de tu poder: Domina en medio de tus enemigos.

Abre tu boca por el mudo, en el juicio de todos los que están destinados a la muerte.

Aprended a hacer el bien; buscad juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, abogad por la viuda.

Jehová vendrá a juicio contra los ancianos de su pueblo y contra sus príncipes; porque vosotros habéis devorado la viña, y el despojo del pobre está en vuestras casas.

Y en misericordia será establecido el trono; y sobre él se sentará firmemente, en el tabernáculo de David, quien juzgue y busque el juicio, y apresure la justicia.

Engordaron y se pusieron lustrosos, y sobrepasaron los hechos del malo; no juzgaron la causa, la causa del huérfano; con todo, se hicieron prósperos, y la causa de los pobres no juzgaron.

He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales levantaré a David un Renuevo justo, y un Rey reinará y prosperará, y hará juicio y justicia en la tierra.

En aquellos días y en aquel tiempo haré producir a David Renuevo de justicia, y hará juicio y justicia en la tierra.

Buscad a Jehová todos los humildes de la tierra, que pusisteis en obra su juicio; buscad justicia, buscad mansedumbre; quizá seréis guardados en el día del enojo de Jehová.

Bienaventurados los mansos; porque ellos heredarán la tierra.

Los ciegos ven y los cojos andan, los leprosos son limpiados y los sordos oyen, los muertos son resucitados y a los pobres es predicado el evangelio.

Y Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, fue al sumo sacerdote,

Y yo, Pablo mismo, os ruego por la mansedumbre y bondad de Cristo; yo que estando presente soy humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con vosotros;

mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.

¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por buena conducta sus obras en mansedumbre de sabiduría.

Y tenía en su diestra siete estrellas; y de su boca salía una espada aguda de dos filos, y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.

Arrepiéntete, porque si no, vendré pronto a ti, y pelearé contra ellos con la espada de mi boca.

Y vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que estaba sentado sobre él, era llamado Fiel y Verdadero, y en justicia juzga y pelea.

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Reina Valera Gómez (© 2010)

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