Isaías 33:20

Mira a Sión, ciudad de nuestras fiestas solemnes; tus ojos verán a Jerusalén, morada de quietud, tienda que no será desarmada, ni serán arrancadas sus estacas, ni ninguna de sus cuerdas será rota.

Salmos 46:5

Dios está en medio de ella; no será conmovida: Dios la ayudará al clarear la mañana.

Isaías 32:18

Y mi pueblo habitará en morada de paz, y en habitaciones seguras, y en recreos de reposo.

Isaías 54:2

Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas.

Deuteronomio 12:5

Mas el lugar que Jehová vuestro Dios escogiere de todas vuestras tribus, para poner allí su nombre para su habitación, ése buscaréis, y allá iréis:

Salmos 48:12-13

Andad alrededor de Sión, y rodeadla; contad sus torres.

Salmos 78:68-69

Sino que escogió la tribu de Judá, el monte de Sión, al cual amó.

Salmos 125:1-2

«Cántico gradual» Los que confían en Jehová son como el monte de Sión que no se mueve; sino que permanece para siempre.

Salmos 128:5

Jehová te bendiga desde Sión, y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida;

Isaías 37:33

Por tanto, así dice Jehová acerca del rey de Asiria: No entrará en esta ciudad, ni lanzará saeta en ella; no vendrá delante de ella con escudo, ni levantará baluarte contra ella.

Ezequiel 48:35

En derredor tendrá dieciocho mil cañas. Y el nombre de la ciudad desde aquel día será JEHOVÁ SAMA.

Mateo 16:18

Y yo también te digo que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella.

Apocalipsis 3:12

Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)