Isaías 37:7
`He aquí, pondré en él un espíritu, oirá un rumor y se volverá a su tierra; y en su tierra lo haré caer a espada.'"
Isaías 37:9
Y {les} oyó decir acerca de Tirhaca, rey de Etiopía: Ha salido a pelear contra ti. Y cuando {lo} oyó, envió mensajeros a Ezequías, diciendo:
2 Reyes 7:6
Porque el Señor había hecho que el ejército de los arameos oyera estruendo de carros y ruido de caballos, el estruendo de un gran ejército, de modo que se dijeron el uno al otro: He aquí, el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los hititas y a los reyes de los egipcios, para que vengan contra nosotros.
2 Crónicas 32:21
Y el SEÑOR envió un ángel que destruyó a todo guerrero valiente, comandante y jefe en el campamento del rey de Asiria. Así regresó avergonzado a su propia tierra. Y cuando había entrado al templo de su dios, algunos de sus propios hijos lo mataron allí a espada.
Job 4:9
Por el aliento de Dios perecen, y por la explosión de su ira son consumidos.
Job 15:21
Ruidos de espanto hay en sus oídos, mientras está en paz, el destructor viene sobre él.
Salmos 58:9
Antes que vuestras ollas puedan sentir {el fuego de} los espinos, tanto los verdes como los que arden, los barrerá El con torbellino.
Isaías 10:16-18
Por eso el Señor, DIOS de los ejércitos, enviará una enfermedad extenuante entre sus robustos guerreros; y debajo de su gloria encenderá una hoguera como fuego abrasador.
Isaías 10:33-34
He aquí, el Señor, DIOS de los ejércitos, desgajará el ramaje con terrible crujido; los {árboles} de gran altura serán cortados, los elevados serán abatidos.
Isaías 17:13-14
Las naciones rugen como el rugido de muchas aguas, pero El las reprenderá y huirán lejos; serán perseguidas como el tamo de los montes delante del viento, y como polvo de torbellino delante del vendaval.
Isaías 29:5-8
Pero la multitud de tus enemigos será como polvo fino, y la multitud de los crueles como paja que se va volando; sucederá en un instante, de repente.
Isaías 30:28-33
y su aliento como un torrente desbordado que llega hasta el cuello, para zarandear a las naciones en una zaranda de destrucción, y {poner} la brida que conduce a la ruina en las mandíbulas de los pueblos.
Isaías 31:8-9
El asirio caerá por espada no de hombre, y la espada no humana lo devorará; no escapará de la espada, y sus jóvenes serán sometidos a trabajos forzados.
Isaías 33:10-12
Ahora me levantaré --dice el SEÑOR-- ahora seré exaltado, ahora seré ensalzado.
Isaías 37:36-38
Y salió el ángel del SEÑOR e hirió a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios; cuando {los demás} se levantaron por la mañana, he aquí, todos eran cadáveres.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido