Isaías 38:14

Como la grulla, y como la golondrina me quejaba; gemía como la paloma; alzaba en lo alto mis ojos: Señor, violencia padezco; confórtame.

Aullamos, como osos todos nosotros, y gemimos lastimeramente como palomas; esperamos juicio, y no lo hay; salud, y se alejó de nosotros.

He venido a ser hermano de los dragones, y compañero de los búhos.

He trabajado llamando, mi garganta se ha enronquecido; han desfallecido mis ojos esperando a mi Dios.

Responde por tu siervo para bien; no me hagan violencia los soberbios.

Y los que escaparen de ellos, estarán sobre los montes como palomas de los valles, gimiendo todos, cada uno por su iniquidad.

Y la reina será cautiva; le mandarán que suba, y sus criadas la llevarán, gimiendo como palomas, batiendo sus pechos.

Pon ahora, dame fianzas contigo; ¿quién tocará ahora mi mano?

Mi corazón fue herido, y se secó como la hierba; por lo cual me olvidé de comer mi pan.

Desfallecieron mis ojos por tu dicho, diciendo: ¿Cuándo me consolarás?

A ti alcé mis ojos, a ti que habitas en los cielos.

Respóndeme pronto, oh SEÑOR que desmaya mi espíritu; no escondas de mí tu rostro, y venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura.

Ayin: Aun nos han desfallecido nuestros ojos tras nuestro vano socorro. En nuestra esperanza aguardamos gente que no puede salvar.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido